El asesor en materia penitenciaria del Gobierno Vasco, Jaime Tapia, aseguró este domingo no tener “ninguna duda” de que los presos de ETA a los que se les concede el tercer grado penitenciario están arrepentidos de sus acciones terroristas incluso aunque no utilicen de manera expresa la palabra perdón. Ahondó en que este término es precisamente una de las “discrepancias jurídicas de matiz” entre el ejecutivo de Lakua y la Audiencia Nacional (AN), que ha revocado 10 de las 39 progresiones concedidas a presos de ETA.

Tapia instó a no refugiarse en la palabra perdón como un “tótem”, ya que apuesta por validar “expresiones similares que denotan arrepentimiento, reconocimiento del daño, voluntad de que las cosas no vuelvan a ocurrir y empatía o consideración hacia las víctimas”, lo que en “la práctica es lo mismo”. No en vano, y a la hora de determinar si se trata de una expresión “sincera y honrada” que verdaderamente muestre un arrepentimiento”, el asesor del Gobierno Vasco aboga por “observar y entrevistar al preso en el propio centro penitenciario donde juristas, trabajadores sociales y educadores “identifican si realmente hay esa actitud similar o análoga”.

Son esos expertos los que emiten un informe que se incorpora a otros documentos para dar “fundamento a decir que se cumple el requisito” de pedir perdón de manera expresa. Por ello cuando las Juntas de Tratamiento de la cárcel plantean la progresión de grado de un preso Tapia tiene claro que “hay un arrepentimiento”. “No tengo ninguna duda porque me fío de los expertos que trabajan con ellos. Esa es la mejor prueba del algodón” y es más valioso que un perdón que puede ser “falso o utilitarista”, ahondó.

Cifras

En cuanto a las progresiones de grado a presos de ETA, Tapia recalcó que las que se conceden están “motivadas” y se basan en un análisis “riguroso, exhaustivo y caso a caso” y concluyó que, a la vista de los autos de la Audiencia Nacional en los que ha revocado la concesión de terceros grados, sólo hay “discrepancias de matiz”. Desde que Euskadi asumió la gestión de las cárceles en octubre de 2021 se han concedido 668 terceros grados, 41 de ellos a presos de ETA –39 por parte del Gobierno Vasco y dos por la propia AN–. Este órgano judicial ha revocado diez progresiones, una cifra que a Tapia no le hace sentir “desacreditado” porque el 65% de los terceros grados han sido respaldados.

Por otro lado, Tapia aseguró comprender “humanamente” que haya víctimas de ETA que critican que los terroristas logren la semilibertad, pero les recordó que “las leyes hay que cumplirlas para las víctimas y para los victimarios”. El asesor del Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales “respeta y entiende” a las víctimas, entre las que se incluye porque durante su etapa como juez su vida se vio “muy condicionada” por la amenaza terrorista. “He sufrido mucho y mi familia también, pero tengo que cumplir la ley”, concluyó Tapia.