Donostia – La batalla abierta entre el Gobierno español y las altas instancias de la Judicatura, que han protagonizado sendos choques en el pasado más reciente, parece vivir al fin un poco de calma con la toma de posesión de los cuatro nuevos magistrados del Tribunal Constitucional (TC). Con la asistencia del presidente Pedro Sánchez, el pasado sábado 31 de diciembre juraron su cargo ante el rey Felipe VI y en el palacio de la Moncloa los jueces Juan Carlos Campo, Laura Díez Bueso, María Luisa Segoviano y César Tolosa Tribiño como nuevos miembros de un TC que renueva parcialmente sus puestos, una renovación largamente esperada y que pendía desde el pasado 12 de junio.

Al acto acudieron los más altos cargos del aparato institucional estatal. Además de Felipe VI y el presidente Sánchez, también estuvieron presentes la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet; el presidente del Senado, Ander Gil; el presidente del Tribunal Constitucional, Pedro José González-Trevijano; el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Rafael Mozo; la ministra de Justicia, Pilar Llop; y la directora general de Seguridad Jurídica y Fe Pública, Sofía Puente. En todo caso, y pese a haber jurado o prometido sus cargos, Campo, Díez, Tolosa y Segoviano no tomarán posesión efectiva hasta el día 9 de enero a las 12.30 horas. Posteriormente, y tras la aparente calma que se vive estos días de Navidad, todo hace indicar que las marejadas volverán al alto órgano de la judicatura. No en vano, se procederá a la elección del nuevo presidente, según fuentes consultadas por Europa Press. Para ello, se convocará formalmente un nuevo Pleno, que no puede programarse hasta que los nuevos magistrados hayan tomado posesión y que varias fuentes del Tribunal Constitucional prevén que pueda celebrarse el 10 de enero.

El Pleno del Tribunal Constitucional dio el visto bueno a los cuatro nuevos magistrados para la renovación parcial del órgano de garantías tras examinar si cumplían con los requisitos de idoneidad que fija la ley. Según informó el propio órgano de garantías, el Pleno Gubernativo aprobó por unanimidad las candidaturas de Campo, Díez, Tolosa y Segoviano. El tribunal consideró que los cuatro reúnen los requisitos establecidos: son ciudadanos españoles de carrera magistrados, fiscales, abogados, profesores universitarios o funcionarios públicos, “todos ellos juristas de reconocida competencia con más de quince años de ejercicio profesional o en activo en la respectiva función”. Campo –ministro de Justicia con el PSOE– y Díez –ex directora general de Presidencia con Sánchez– fueron nombrados a propuesta del Gobierno, ante lo que el PP reclamó que sus candidaturas fueran sustituidas por otros aspirantes de perfil independiente.

Órgano de los jueces

Los cuatro magistrados designados por el Gobierno y el CGPJ –Consejo del poder Judicial– reemplazarán al presidente del TC, Pedro González-Trevijano; su vicepresidente, Juan Antonio Xiol; y los magistrados Antonio Narváez y Santiago Martínez-Vares, que componen el tercio que la Constitución encarga renovar al Ejecutivo y al órgano de gobierno de los jueces. Esta renovación parcial del Tribunal Constitucional estaba pendiente desde el pasado 12 de junio, cuando cuatro de los doce magistrados del tribunal vieron caducar su mandato. Y viene a calmar en parte el tenso momento entre judicatura y Gobierno, si bien la convocatoria del nuevo Pleno que se vislumbra para mediados de enero puede volver a tensar la cuerda entre PSOE y PP, enfrentados durante largos años por los movimientos que se dan en los órganos de la judicatura. l

Agenda

l Ley del aborto. Un Tribunal Constitucional de mayoría progresista, tras la reciente incorporación de cuatro nuevos miembros, estudiará durante las próximas semanas los recursos contra las reformas que atañen al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y al propio TC, contra la ley catalana que elimina la cuota del 25% de castellano en las aulas o contra la ley del aborto. Los recursos ante los que deberá responder el tribunal de garantías fueron presentados por el PP y Vox.