La red ciudadana Sare ha llevado a cabo este sábado movilizaciones en Donostia y Basauri para reclamar que se acabe con "todas las medidas de excepción" que se aplican a los presos de ETA y denunciar los "obstáculos" existentes.

Sare ha realizado sendas marchas desde la cárcel de Martutene a las once de la mañana y desde la de Basauri a las doce, bajo el lema Etxera bidea gertu (el camino a casa cerca). Además, ha llamado a "llenar la calle Autonomía" de Bilbao el próximo 7 de enero.

La red ha llevado a cabo varias movilizaciones estas navidades para resaltar que, en "estas fechas especiales", es importante denunciar "la situación de quienes tienen vulnerados sus derechos y, aun cumpliendo todos los requisitos, los mantienen en la cárcel en segundo grado".

Desde Sare valoraban que 2022 ha sido "un año muy importante" ya que "se ha dado un gran paso en el fin de la política de alejamiento". Según han indicado, los reclusos "están más cerca de casa, y esa es una gran noticia para la sociedad vasca".

No obstante, han advertido de que existen "un sinfín de obstáculos en su camino de regreso a casa" y, por ello, es preciso "seguir trabajando para acabar con todas estas medidas de excepción".  

Etxerat

Por su parte, la asociación de familiares y allegados de presos de ETA, Etxerat, se movilizó en la jornada de ayer viernes y destacó que 2023 se inicia "a las puertas de poner fin a una de las vulneraciones de derechos más flagrante sufridas durante décadas por los presos vascos y sus familiares: el alejamiento y la dispersión".

En ese sentido, señaló que a finales del pasado año había "90 presos vascos y otros 21 en el Estado francés encarcelados en prisiones alejadas de Euskal Herria" y, doce meses después, "son 14 los presos que restan por acercar desde España y 12 los que continúan en prisiones francesas".