La aparente e inesperada purga pública del expresidente Hu Jintao, predecesor inmediato del actual líder chino, Xi Jinping, convulsionó ayer la clausura del XX Congreso del Partido Comunista de China (PCCh), en el que Xi cimentó su ya enorme poder perpetuándose un lustro más al frente del gigante asiático.

Lo sucedido con Hu, de 79 años, eclipsó la elección del nuevo Comité Central, del que saldrán el Politburó y el nuevo Comité Permanente del PCCh, el máximo escalafón del poder chino, cuya composición se conocerá hoy tras innumerables quinielas que tratan de aventurar quiénes acompañarán a Xi en la cúpula durante el próximo quinquenio.

Hu, con el rostro demudado, fue escoltado fuera de la sala de plenos del Gran Palacio del Pueblo segundos después de que la prensa accediera al hemiciclo. Las cámaras tuvieron vía libre para captar cómo un bedel se le acercaba para sacarlo por la fuerza del hemiciclo ante las caras de estupor de Li Zhangshu y Wang Huning, los actuales números tres y cinco del Partido.

Aunque Hu se resistió mientras tiraban de él, como se aprecia en su chaqueta, terminó marchándose tras interpelar a Xi, quien permanecía con la mirada al frente ajeno a lo que sucedía a escasos centímetros de su espalda.

Televisado en directo

Una purga televisada y sin acusaciones de por medio sería algo insólito en el PCCh actual, pero otros expertos están convencidos de que el suceso escenificó la laminación en directo de esta facción, a la que los expertos han definido como más liberal, pragmática y orientada al mercado.

Además, ya se sabe que en el nuevo Comité Central, el grupo de 205 miembros (más suplentes) que dirige el régimen, no figuran los más cercanos a Hu, como el actual primer ministro, Li Keqiang, o Wang Yang, vice primer ministro, quienes se retirarán de la vida política a sus 67 años. De hecho, cuando abandonaba el recinto y al pasar por detrás de la primera fila en la que estaba sentada la cúpula de dirigentes, Hu tocó el hombro a Li, en un gesto que algunos interpretaron como de solidaridad por la pérdida de influencia en la formación.

Queda por ver si Hu Chunghua, apodado “pequeño Hu” por su cercanía con el expresidente, tiene opciones de entrar en el Comité Permanente del PCCh, aunque todo parece indicar que sus miembros serán todos aliados muy próximos a Xi.

Purgado en las redes

Hu ha sido incluso purgado de las redes sociales chinas, y la publicación más reciente en la que se puede hallar el nombre del antiguo mandatario data del 18 de octubre, en la que una cuenta cita unas palabras del político sobre desarrollo económico.

Si el PCCh quería mostrar una imagen de unidad no parece haberlo conseguido a tenor de lo sucedido ayer, a lo que hay que sumar los últimos dardos que Xi lanzó a su antecesor: “Había dentro del partido una falta de entendimiento claro, falta de medidas efectivas y una tendencia a la debilidad. La burocracia, el hedonismo y la extravagancia persistía en muchos lugares y departamentos”, dijo en el discurso de apertura del cónclave.

Xi también sostuvo que “se encontraron casos chocantes de corrupción”, que “el crecimiento no estaba equilibrado ni era sostenible ni coordinado” y que algunas personas “ni siquiera tenían fe en el sistema socialista”.

Indispuesto

Hu Jintao “no se sentía bien y su personal le acompañó a otra habitación para que descansara”, aseguró la prensa oficial china. La agencia estatal Xinhua aseveró que Hu había “insistido” en asistir a la sesión de clausura “pese a que últimamente ha necesitado tiempo para recuperarse”. “Cuando hoy [por ayer] no se estaba sintiendo bien durante la sesión, su personal, por su salud, le acompañó a una habitación contigua para que descansara”. l

En corto

Acuerdo con el Vaticano. El Vaticano anunció ayer la renovación hasta 2024 de su acuerdo provisional con China sobre el nombramiento de obispos, hasta 2018 principal escollo entre las dos partes sin relaciones diplomáticas, a pesar de la lentitud con la que procede el diálogo y las dificultades surgidas en estos años. “La Santa Sede y la República Popular de China, tras oportunas consultas y valoraciones, han concordado prorrogar por otro bienio la validez del Acuerdo Provisional sobre el nombramiento de obispos”, se leía en la nota difundida por el Vaticano.

Condenas en Hong Kong. Nueve jóvenes de entre 22 y 36 años han sido condenados a entre 35 y 48 meses de cárcel por participar en los disturbios de la Universidad Politécnica de Hong Kong durante las protestas políticas de 2019. Las autoridades chinas aseguran que la polémica Ley de Seguridad ha restaurado la estabilidad en Hong Kong.