La secretaria general del PP vasco, Laura Garrido, pidió ayer a las instituciones de Euskadi que se impliquen “al máximo” para “desterrar del paisaje los actos de enaltecimiento de ETA” que suponen una “continua humillación y revictimización” de las víctimas. Si es necesario, propuso que se “revise la legislación vigente” porque esos actos permiten “asentar una visión justificadora del terrorismo”.

En una mesa redonda sobre el derecho de participación de las víctimas organizada por la UPV/EHU en Donostia, exigió que se ponga fin “a la exaltación del terrorismo en las calles” de Euskadi. “Se lo debemos a las víctimas del terrorismo y toca actuar”, exhortó.

La dirigente popular denunció que, once años después del fin de la actividad de ETA, el enaltecimiento del terrorismo todavía “no ha sido desterrado”. “A priori, instrumentos tienen para ello, pues tanto las leyes de víctimas estatal como autonómica supusieron un antes y un después en la lucha y deslegitimación del terrorismo”, recordó. Garrido señaló que la Ley Vasca de 2008 se refiere al terrorismo “como una de las mayores lacras que ha soportado la sociedad vasca” y subraya la necesidad de su “deslegitimación” y del “reconocimiento a las víctimas”.

Recordó que las víctimas de ETA solicitan de forma reiterada la prohibición de estos “homenajes a terroristas que salen de la cárcel”. A su juicio, es un “mal ejemplo para los vascos del mañana que una sociedad permita que estos actos se desarrollen con total impunidad”.