El PSOE niega que el bloqueo en el proceso de transferencias se deba a una decisión política para aparcar de manera deliberada ese debate, y lo atribuye todo a la irrupción del coronavirus, que desplazó el eje de las prioridades. El portavoz de la Ejecutiva federal del PSOE, Felipe Sicilia, defiende la vigencia del acuerdo PNV-PSOE para la investidura de Pedro Sánchez. El acuerdo recoge en su artículo número 3 que el Gobierno español debía proceder en 2020 “a la negociación y traspaso a la CAV de las competencias estatutarias pendientes; asimismo, se procederá en el plazo de seis meses al traspaso de las competencias de Tráfico a la Comunidad Foral de Navarra, con el mismo contenido y extensión que las realizadas en su momento a la CAV”.
El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, reprochó el miércoles a Sánchez la falta de avances en la CAV y el manifiesto atasco en el caso navarro, donde Tráfico sigue sin llegar. Sánchez no dijo una palabra sobre el caso navarro, y desató un tsunami en la CAV al anunciar que los ministerios se oponen a negociar cuatro traspasos que estaban en el propio calendario del Consejo de Ministros.
Sicilia respondió en Radio Euskadi que entiende que los socios hagan sus exigencias, pero está convencido de que el PNV entiende que “hemos vivido dos años muy difíciles, donde la urgencia era atender la pandemia”. “Estábamos preocupados por la salud, por que las familias no vieran mermada su economía o se enfrentaran a un corte de luz por la falta de ingresos... Estábamos pendientes de eso. Afortunadamente, la etapa del covid va pasando. Ahora tenemos que hacer frente a las consecuencias de la guerra en Ucrania, pero es verdad que podemos ir sin duda ya tratando cuestiones que tiempo atrás no se pudieron tratar porque la urgencia era el covid”, dijo.
Preguntado por las palabras del lehendakari, que ve reticencias a cumplir el Estatuto, dijo que “no hay ninguna reticencia en seguir avanzando”. Añadió que existe un acuerdo entre los socialistas y los jeltzales que considera prioritaria esta cuestión (habló de un acuerdo de gobierno, que es el que existe en la CAV, pero también está el pacto de investidura en Madrid), y trató de poner en valor que se han realizado traspasos relacionados con las prisiones o con el Ingreso Mínimo Vital. Habló de manera expresa del Estatuto de Gernika.
Hay un acuerdo entre el PSOE y el PNV que contempla esta cuestión como algo prioritario
La Guardia Civil y la Policía foral
Pero este debate concierne también al territorio navarro. El Gobierno foral de María Chivite ha pactado en esta legislatura con el Gobierno español la primera transferencia desde 2001, la sanidad en las prisiones, pero no termina de plasmarse el acuerdo sobre Tráfico. Sigue sin quedar claro a qué se debe este retraso para que la competencia la asuma la Policía foral. El 7 de septiembre de 2021 se había anunciado a bombo y platillo una reunión de la Comisión de Transferencias para el 1 de diciembre, pero a día de hoy el acuerdo sigue sin cerrarse.
Esta negociación se enfrenta a fuertes presiones mediáticas y por parte de la derecha, que agita el miedo a que este traspaso sea la antesala de la expulsión de las fuerzas de seguridad del Estado. Los menos de 200 agentes dedicados al Tráfico podrían pasar a otras unidades de la Guardia Civil en territorio navarro, dedicados a otras competencias; o también integrarse en la propia Policía foral.
En el caso de la comunidad autónoma vasca, el Gobierno español defiende (engordando algo la lista y desgajando cuestiones que forman parte de un traspaso) que ha sellado once transferencias, entre las que destaca la gestión de las prisiones. Queda una treintena de materias por acordar.
