Podemos ratifica la expulsión de su secretaria general en Nafarroa

Iruñea - La Comisión de Garantías Democráticas Estatal de Podemos ha ratificado la expulsión del partido de Laura Pérez Ruano. Confirma de esta forma la decisión adoptada el 19 de febrero por este mismo órgano de Nafarroa y pide a la que fue la primera secretaria general de la formación morada en la Comunidad Foral y candidata en 2015 que entregue su acta de parlamentaria.

La noticia de la expulsión fue dada a conocer por Pérez a través de un comunicado, en el que la afectada expresa su “profunda tristeza por una resolución orquestada por quienes desconocen, desprestigian y desprecian los importantes logros alcanzados en Navarra”.

Denuncia Pérez que su expulsión se ha ratificado “sin tramitar el expediente completo ni las alegaciones interpuestas ante la Comisión de Garantías de Navarra”, durante un proceso en el que se le ha obligado a probar su “inocencia”.

Pérez responsabiliza de este desenlace a la ejecutiva que encabeza Eduardo Santos, que se impuso en las primarias de hace un año a la ahora expulsada por solo 28 votos.

Quien ya está fuera de Podemos-Ahal Dugu no da por zanjado este expediente, ya que según anunció, estudiará “las vías judiciales oportunas”.

su expulsión no era firme Pérez desvela ahora que la propia Comisión de Garantías Estatal confirma que su expulsión “no era firme” hasta ahora y que la Comisión de Garantías de Nafarroa “tampoco es competente para aplicar el Reglamento Disciplinario del Grupo Parlamentario, por lo que la mayor parte de las acusaciones iniciales decaen”.

“Sin embargo, para justificar la expulsión, basada en mi supuesta indisciplina, da tales acusaciones por acreditadas, lo que constituye un despropósito jurídico”, añade.

A juicio de la exlíder de Podemos, “detrás de esta maniobra se esconde una clara intención de orientar el cambio en Nafarroa desde Madrid, fruto de la incomodidad que ha generado mi frontal oposición a posibles alianzas con los partidos del Régimen del 78”.

Pérez, que acusa a la dirección de prácticar “la purga política” y de “renunciar a sus principios fundacionales”, considera que con su expulsión se pretende evitar que pueda presentarse en unas futuras elecciones primarias, con lo que “se utiliza” el órgano de garantías para atacar su actividad parlamentaria, “lo que equivale a la judicialización de la política, que tanto denunciamos desde Podemos”.

Pérez, que no renunciará a su escaño, anuncia que seguirá trabajando “para fortalecer el cambio en Navarra”, ya que, “por encima de siglas y marcas vacías, están los contenidos programáticos y el deber de respetar el mandato popular que se nos ha encomendado, frente a derivas burocráticas o de oportunismo político”.

Una casi renuncia. La parlamentaria de Podemos Fanny Carrillo estuvo ayer muy cerca de presentar su renuncia. Fue al final del pleno del Parlamento cuando se acercó a la letrada mayor de la Cámara para que le informara de los pasos que tenía que dar para dimitir de su cargo. Al parecer, el motivo principal que le llevó a tomar esta decisión obedeció al desacuerdo con la contratación de una asistente parlamentaria. Carrillo, que lloró desconsolada, tenía incluso redactada su dimisión, pero recapacitó después de que los otros tres parlamentarios del sector crítico -Carlos Couso, Laura Pérez y Rubén Velasco- le hicieran ver las consecuencias que tendría su renuncia, ya que podría precipitar la ruptura del grupo parlamentario, al ser su sustituto del sector próximo al secretario general actual, Eduardo Santos, elegido el año pasado por 28 votos.

Control del grupo. Podemos Navarra cuenta con siete parlamentarios. Desde que Pérez fue expedientada, Couso se convirtió en portavoz con el apoyo de Velasco, Carrillo y Pérez. En el supuesto de que cualquiera de estos cuatro opte por abandonar el escaño, el control del grupo parlamentario lo recuperaría la dirección, que en su día nombró portavoz a Mikel Buil, y a quien respaldan Ainhoa Aznárez -que preside el Parlamento navarro- y Tere Sáez.