arrasate - María Ubarretxena es desde ayer la segunda mujer -tras Ino Galparsoro de ANV (2007-2011)- que ocupa el sillón de la Alcaldía de Arrasate. La jeltzale fue proclamada primera edil por mayoría simple, después de que el resto de formaciones electas votaran a sus respectivas cabezas de lista.

El guion estaba prácticamente escrito. La sesión constitutiva de la nueva Corporación municipal emanada de las elecciones del 24 de mayo no deparó sorpresas. Seguida por un nutrido público, discurrió tranquila y con normalidad.

Como marca la tradición, la ceremonia de investidura arrancó con la constitución de la mesa de edad, que estuvo presidida por la concejala más veterana, Amaia Azpiazu (PNV), y la más joven, Eva Abuin (Sí Se Puede-Baleike). Las votaciones no dieron la mayoría absoluta a ningún partido, así que como estaba previsto, Ubarretxena se aupó a la Alcaldía cerrajera con los ocho votos de su partido, la lista más votada en los pasados comicios, y después de que EH Bildu (siete), PSE-EE (tres), Baleike (dos) e Irabazi Arrasate (uno) apoyaran a sus propios candidatos.

La nota distintiva de la sesión la protagonizó la entrega por parte del alcalde saliente, Inazio Azkarragaurizar (EH Bildu), de la zumetza (aro de mimbre) a su sucesora en el cargo. El Consistorio arrasatearra recuperó, de este modo, esta simbólica cesión del testigo del bastón de mando que no se escenificaba desde los años de José Antonio Ardanza y Álvaro Arregi como regidores (ambos del PNV).

Por lo demás, la socialista Anabel Legaz accedió al puesto de concejala tras la renuncia de Verónica Lozano, que era la segunda en la lista del PSE.

colaboración y participación Los jeltzales no ostentaban la Alcaldía desde la legislatura 2003-2007, pero entonces las elecciones no se desarrollaron en igualdad de condiciones al estar ilegalizada la izquierda abertzale. Tras tomar posesión de su cargo, Ubarretxena agradeció a los ciudadanos la confianza depositada en el PNV, y remarcó las ganas de “trabajar duro por y para el pueblo”. Desgranó, además, tres de las columnas vertebrales sobre las que fundamentarán la gestión municipal: colaboración, participación ciudadana y transparencia. En este contexto, abogó por dar continuidad “a la vía del acuerdo” establecida en la última legislatura y dio las gracias a su predecesor por haber trabajado en esa dirección. “Hay que seguir con la dinámica de paz y convivencia de los últimos cuatro años. Ese es el camino y creemos que es lo que la ciudadanía está pidiendo, que haya acuerdos, convivencia y que realmente se trabaje por el pueblo”, declaró.

Defendió, asimismo, la construcción de un Gobierno “fuerte”, e insistió en que no cierran las puertas a ninguna fuerza para que “forme parte de él”.

También tomó la palabra el candidato de EH Bildu, Eneko Barberena. Inició su discurso con unas palabras de gratitud hacía el Gobierno saliente. ”Habéis hecho un buen trabajo y aunque sea en la oposición, nuestra intención es darle continuidad”, indicó.

Todos los electos de la coalición soberanista se colgaron al cuello un pañuelo naranja con motivo de la celebración ayer del Irati Libre Eguna y en rechazo al proceso contra las herriko tabernas. “Defenderemos los derechos humanos de todos los arrasatearras”, sentenció Barberrena.