Donostia. En el monte Jaizkibel y por primera vez con la presencia de medios de comunicación, el Gobierno español destruyó ayer 1.369 kilos de material para fabricar explosivos, 17 kilos de pentrita, 215 metros de cordón detonante y 43 kilos de aluminio en polvo que intervino la Guardia Civil en 2011 en una operación que desarrolló en Legorreta.

Varios componentes del GEDEX de la Comandancia de la Guardia Civil explosionaron el material de manera controlada en una de las laderas del monte Jaizkibel. En la actividad estuvieron presentes el delegado del Gobierno español en Euskadi, Carlos Urquijo, y el subdelegado en Gipuzkoa, José Luis Herrador.

En un contexto en el que buena parte de la sociedad vasca exige a ETA que dé pasos para la destrucción de sus armas, fue el Gobierno español quien convocó por primera vez a los medios para escenificar la destrucción de un arsenal. Mantenido "en depósito" según señaló un comandante de la Guardia Civil, "el tiempo que ha hecho falta para tomar las muestras y contramuestras y realizar los informes periciales que se llevan a cabo para imputar a los detenidos", tras lo que la Guardia Civil solicitó su destrucción al juzgado, que lo autorizó el pasado 14 de febrero.