- Le costó estrenarse, pero Eneko Labaka le ha cogido el gusto a llevarse a casa la txapela del Memorial Goñi y, este año junto a Aizpuru, ha repetido el triunfo del año pasado, entonces junto a Sarasa, tras imponerse ayer a Elola-Irazustabarrena por 22-14. La txapela del cuatro y medio promesas, por su parte, fue para Ekhi Irribarria, que se impuso por un ajustado 22-21 a Unai Amiano en una emocionante final. Con dos buenos partidos, las finales pusieron un broche de oro a la XXX edición del Memorial Goñi, la del reencuentro, en la que, con todo, lo mejor fue la respuesta del público en su vuelta al frontón Beloki de Zumarraga. Si la entrada durante las seis semanas anteriores fue buena, en las finales el frontón rozó el lleno, y eso que estas también pudieron seguirse en directo por Internet. En el Torneo Popular, Oliveira-Tapiador se calaron las txapelas tras ganar por 18-14 a Rodríguez-Alemán.
En la final de elite parejas, Eneko Labaka volvió a brillar para repetir txapela junto a un Aizpuru más seguro que Irazustabarrena, que no pudo repetir la gran imagen mostrada durante todo el campeonato. Ya sea por la presión de jugar la final, por la presencia de tanto público en las gradas o por las cámaras de televisión, el de Alegia cometió más errores de lo habitual, lo que deslució su buen campeonato.
El partido comenzó marcado por los errores, en este caso por ambos bandos, pero pronto fue Eneko Labaka el que impuso su ley, con remates de todas las facturas, para llegar a adelantarse por 5-12. Se esperaba un apasionante duelo de delanteros y, aunque le costó entrar en juego, Elola también dejó su sello en la final. El explosivo delantero de Bidania trató de echarse el peso de la pareja a la espalda y tuvieron su momento, llegando a acercarse a cuatro tantos en el 16-12. Sin embargo, los ayer colorados no tuvieron la consistencia suficiente para culminar la remontada y Labaka-Aizpuru se llevaron las txapelas con total merecimiento.
En el cuatro y medio promesas, Ekhi Irribarria venció por la mínima a Unai Amiano en una final que tuvo todo lo que se le puede pedir a un encuentro de estas características, ritmo, remates, pocos fallos, alternativas y emoción, muchísima emoción, tanta que la tensión se podía cortar con un cuchillo en un último tanto en el que el de Arama culminó con un pelotazo atrás un gran campeonato.
El goierritarra comenzó mandando, adelantándose 6-0 en el marcador, pero Amiano no se amilanó, empatando enseguida (6-6). Una pelota que el irundarra dejó pasar creyendo que iba fuera devolvió el saque a Irribarria y el duelo entró en una fase de constantes alternativas, en la que cada uno con su pelota hacía daño a su rival. Los dos, uno con la derecha y el otro con la zurda, demostraron mucho poder, pero, a su vez, exhibieron calidad en sus remates.
Tras un duelo de mucho ritmo, el de Arama parecía tener encarrilado el partido al adelantarse 19-16, pero una pasa de saque en el peor momento pudo costarle cara. Con el cansancio haciendo mella, el choque tocó techo en un final disputado de poder a poder en el que la txapela pudo caer de cualquier lado, pero fue Ekhi Irribarria quien más entonado estuvo en un último tanto en el que le tocó restar pero consiguió imponerse.
En definitiva, unas emocionantes y vistosas finales con las que se dieron carpetazo a una exitosa edición del Memorial Goñi.