Esencia de Berasaluze

Duración 61 minutos y 20 segundos.

Saques 1 de Berasaluze VIII.

Pelotazos 483 pelotazos a buena.

Tantos en juego 12 de Berasaluze VIII, 3 de Albisu y 6 de Ezkurdia.

Errores 2 de Berasaluze VIII, 4 de Albisu, 3 de Ezkurdia y 3 de Zubieta.

Marcador 1-3, 2-4, 3-4, 3-5, 4-5, 5-6, 6-7, 10-8, 11-8, 16-9, 17-10, 18-11, 19-11, 19-12, 20-12 y 22-12.

Incidencias Alrededor de 300 personas, en una pobre entrada del frontón Bizkaia de Miribilla, asistieron para contemplar la segunda jornada del grupo A del torneo Aste Nagusia de mano profesional.

Bilbao. Abrió el tarro de las esencias Pablo Berasaluze. El manista, abrazado a su espíritu funambulista, destrozó con el saque remate a Joseba Ezkurdia -quien sustituía a Yves Xala por una lumbalgia- y Aitor Zubieta, cimentando su facilidad de golpe franco, en gran medida, en el martillo de Jon Ander Albisu, bien situado y con una sobriedad infinita. Ocurre que el diablo berriztarra, un crack con cuero cerca del frontis, tuvo todo de cara al confiar su espalda al golpeador ataundarra, cuyo juego consiste, única y exclusivamente, en golpear y golpear hasta destrozar el frontis, hasta reventar las defensas de sus contrincantes en los cuadros largos. Así, el guardaespaldas guipuzcoano dominó al coloso etxarriarra y el panorama se tiñó de un riguroso colorado.

Eso sucedió a partir de una volea fallada por Ezkurdia que colocó el empate a siete en el marcador. Y es que, anteriormente, la batalla se tornaba cruenta en los cuadros alegres al estar el voleísta de Arbizu bien plantado y Pablo superado en algunos lances por la fuerza de su contrincante. No duraron las hostilidades demasiado, puesto que tras esa igualada Berasaluze destapó su tarro de las esencias, exhibiendo un saque-remate de martillo espectacular hasta el 10-7.

La brecha de los azules, entonces, se transformó en una sangría, en un bombardeo exagerado. No obstante, Joseba Ezkurdia y Zubieta intentaron plantar cara, pero una vez rotas las igualdades iniciales se llegó a un punto de no retorno. Merced a la gran capacidad de dominio de Albisu, Berasaluze amplió las distancias hasta el 16-8. No se achicó Ezkurdia y se lanzó con su mejor arma, la volea. El 16-10 fue una bomba al frontis de su zurda que levantó al público y le dio moral. Pero Pablo no le dejó más respiro. Entre dejadas y ganchos impartió cátedra hasta acunar doce tantos de bella factura.

Pablo y Albisu se jugarán el billete a la final del torneo contra Aimar y Begino. El delantero goizuetarra y el zaguero de Autza llevan una victoria en su casillero, como el tándem vizcaino-guipuzcoano, por lo que el ganador saldrá citado al próximo sábado en el Bizkaia.