Juantxo Koka está preparándose para conocer otro modo de jugar a la pelota. La promotora Asegarce decidió no renovar el contrato del donostiarra el pasado mes de septiembre, pero Koka no se planteó poner fin a su carrera. El pelotari ya ha hablado con otras empresas para seguir jugando, y en breve podría sellar su vinculación con Garfe. El de Altza comenzará así una nueva etapa en su trayectoria, sin la emoción y el nivel de los grandes campeonatos, sin la atención de los medios de comunicación y sin el murmullo de los artekaris. Le esperan otros frontones, otros compañeros e, incluso, otros cuadros. Otra forma de jugar a la pelota. Koka tiene claro que "lleva dentro" este deporte: "La afición por la pelota está ahí, es lo que sé hacer de toda la vida, y no me apetecía dejarlo todavía".

El pelotari de Altza, de 36 años, admite que se llevó "un chasco" cuando Asegarce no le ofreció la renovación: "No me lo esperaba. Antes de que me dijeran la decisión de la empresa había preparado el Campeonato del Cuatro y Medio con ilusión. Incluso me estaba preparando más de lo habitual. Creo que estaba con un buen nivel para seguir jugando, y de abajo tampoco venía gente que me pudiera quitar. A partir de los 35 años, si eres de primera línea te mantienen, pero cuando estás entre primera y segunda ya no cuentan contigo. Las empresas quieren gente joven. Ha sido más duro de lo que esperaba, pero ya lo he asimilado y ahora empieza una nueva etapa de mi vida" .

Koka, campeón manomanista en Segunda y vencedor de un Campeonato por Parejas de Primera, sabe que a partir de ahora no entrará en la disputa por los principales títulos. El pelotari es consciente de que "las empresas grandes son Aspe y Asegarce. Ya he asimilado la nueva vida que tengo que hacer como pelotari: no salir nada en la prensa y jugar partidos, como quien dice, de Segunda, como si fuera un aficionado más. Voy a jugar por los pueblos y de diferente manera, sin corredores ni televisión. No creo que haya ninguna competición, será todo exhibiciones: inauguraciones de frontones y fiestas de los pueblos. Va a ser otra etapa de la vida, muy diferente".

El donostiarra ya imagina cómo será este nuevo capítulo de su carrera: "Hay que cambiar de chip y yo ya lo he cambiado al 100%. Ves que poco a poco se va terminando tu vida como profesional, y quiero alargarla un poquito más porque físicamente me encuentro bien y no tengo ninguna lesión de manos. Quiero prolongar mi vida profesional jugando unos años más, por frontones en los que no he jugado nunca, descubiertos, secos… pero, bueno, es algo que llevas por dentro. La afición por la pelota está ahí, es lo que sé hacer de toda la vida, y no me apetecía dejarlo todavía".

el futuro

Cerca de Garfe

Koka podría firmar por la promotora Garfe en los próximos días, aunque también ha recibido llamadas de otras empresas y "todavía hay que sentarse a hablar": "No he firmado ningún contrato, pero está apalabrado. Es una empresa que te da muchos partidos, sobre todo en verano, y al final el pelotari lo que quiere es jugar, cuanto más mejor, y ganar un poco de dinero. Si ganas más partidos, ganas más dinero, y al final eso es lo que queremos todos".

Otros dos pelotaris veteranos, como Fernando Arretxe y Oskar Lasa también están en la órbita de la promotora. En opinión de Koka, "a partir de ahora puede subir el nivel de juego, y eso será bueno para poner las pilas a los pelotaris y jugar más".

Zaguero y delantero

"Jugar atrás siempre ha sido mi ilusión"

Si las negociaciones con Garfe marchan por el buen camino, Koka regresará a los frontones este viernes en El Antiguo, con Mikel Goñi y los hermanos Báez. El pelotari de Altza acostumbra a jugar como delantero, pero en este partido jugará en los últimos cuadros: "Siempre ha sido mi ilusión jugar de zaguero. Hasta los 18 años jugaba atrás. Luego empecé a jugar adelante y debuté como delantero, pero siempre me ha gustado jugar de zaguero. En Asegarce ya disputé dos partidos de zaguero cuando les faltaba gente. Tenía el gusanillo de probar".

En cualquier caso, Koka supone que seguirá jugando como delantero en su nueva andadura: "La gente me conoce como delantero y querrá que juegue ahí, pero eso no quita que algún partido que otro juegue atrás. En esta nueva empresa el reto es jugar buenos partidos y gustarle a la gente, y que los aficionados vean que todavía estamos para jugar y que disfruten. Ahora, al tener menos presión, puedes jugar de manera más alegre, entrar más de aire… Además, cuando juegas más tranquilo las cosas salen mejor. No tienes gente que te empieza a pitar, no se juega dinero en los frontones, y la verdad es que vas mucho más tranquilo". La preparación física también es más relajada: "Suelo ir dos o tres días a correr y un día a la semana hago frontón, en Usurbil, cuando antes hacía dos. Nos juntamos cuatro amigos y nos movemos más por diversión. No tiene nada que ver".

Koka aspira a continuar su carrera "unos dos o tres años más. Ahora tengo 36 y, si me encuentro bien, igual la alargo hasta los 40".

Quedarse fuera de Aspe o de Asegarce supone quedarse fuera de la lucha por los campeonatos más prestigiosos. El pelotari donostiarra ya lo tiene asumido y recuerda los títulos que ganó en 1997 y 2003 -que fue la penúltima victoria que conquistó un pelotari guipuzcoano en una competición de Primera-: "Echo la vista atrás y por lo menos tengo unas txapelas: el Manomanista de Segunda que gané a Mikel Goñi y el Campeonato por Parejas. Pocos pelotaris pueden decir eso. Han sido logros importantes en mi carrera profesional". Una carrera que este mismo viernes comenzará una última etapa.