Una lesión jugando al fútbol le abrió las puertas de la magia…

Sí, la verdad que ahora mismo digo más por suerte que por desgracia pero fue así. Jugando a fútbol tuve la mala fortuna de lesionarme y no poder seguir jugando. Con tanto tiempo libre que tuve vi en la tele la primera temporada de Got Talent España donde salía un mago, el cual cambiaba de color unas cartas de blanco a cartas de póquer. A partir de ahí me empecé a aficionar hasta el día de hoy.

Con sólo 20 años acumula unos cuantos premios muy importantes y ha actuado en medio mundo. ¿Cómo ha sido posible?

Yo tengo un par de frases que creo que me definen a la perfección como mago y como persona. Y son: “Insistir, persistir y nunca desistir” y “Nadie cree en los locos hasta que lo consiguen”. Siento que esas dos frases reflejan lo que he tenido que pasar para poder llegar a donde estoy. Al final, ensayar cuando no te apetece o estar pensando en nuevos juegos o en magia constantemente, a pesar de todo, es lo que yo creo que ha hecho que pueda llegar a donde estoy.

Practica la magia de cerca y de escenario. ¿Con cuál se queda?

Sinceramente, en la magia de cerca puedes observar muy de cerca las caras de asombro y emoción del público y eso es único, y me hace sentir súper feliz. Sin embargo, desde el primer día que subí a un escenario, noté una energía que no había sentido en la vida, y eso ha provocado que me quede con el escenario sin ninguna duda.

¿Y cuál es la que más le gusta al público?

Depende. Pero con la que he sentido que la gente conecta y se queda muy asombrada es con la magia mental o el mentalismo. Eso de saber lo que va a pasar sin que aún haya pasado a la gente le deja muy sorprendida.

Cuando dice que es un mago del siglo XXI, ¿a qué se refiere?

Siento que aún se sigue asociando la figura de mago con esa persona que va con un frac antiguo y saca conejos y palomas de su chistera, y que únicamente es el entretenedor de niños. Y yo siento que estoy para dar ese giro de tuerca a las personas que piensan de ese modo, y demostrar que la magia es un arte tanto para gente joven como para un público más adulto.

¿Se fija en las reacciones de los espectadores?

Sí, y eso me flipa. Sinceramente, ver las reacciones y la cara de la gente después de hacer magia es una de las cosas más bonitas o la más bonita de todas.

Cuando es usted el espectador, ¿disfruta o se pasa la función intentando encontrar “el truco”?

Al final, se quiera o no, tengo conocimientos que indiscutiblemente provocan que me sepa varios juegos de magia. Es por ello que me centro más en la manera que lo presenta o en el ambiente/atmósfera que crea. Sin embargo, también tengo que decir que cuando algún mago presenta algo innovador, disfruto de ello como un niño.

Ya hemos dicho que ha ido muy rápido. ¿Se ha puesto una meta?

Por supuesto. Sin duda mi sueño/meta es poder llegar a estar una temporada en la Gran Vía de Madrid, y estar actuando durante varios días a la semana y que la gente pueda venir a disfrutar del espectáculo. Ese sería mi sueño, que tarde o temprano sé que lo voy a conseguir. l