manu Majors Etxebarrieta ha cambiado el Jaguar por el autobús de linea para venir a Donostia desde Bilbao, pero llega a la sede de la Academia Vasca de Jurisprudencia impecablemente vestido y se dirige a la barra, donde se encuentra Galtzagorri.

-Me gusta venir a juicios a Donostia? hay que reconocer que tenéis unos bares bastante decentes -el abogado bilbaino comenta a guisa de saludo y se apodera de una banderilla-, y parece que vais a tener un amistoso internacional de rugby dentro de un mes. Esperemos que esta vez abran bien las puertas para que los espectadores podamos ver el Siva Tau de los jugadores de Samoa?

-¡Qué pelma te pones! Lo que tienes que hacer es explicarme qué pasa con el rugby vizcaino. En cuanto a los chicos Gernika sin ganar un partido, Getxo, Durango y Uribealdea por la división de abajo y en cuanto a las chicas ni se sabe dónde.

-Tenemos el rugby que nos merecemos hoy, que diría tu amigo Regis Sonnes - dice el botxero sin perder su flema-, y mañana tendremos el rugby que nos hayamos merecido, lo importante es tener objetivos claros, seguir el camino planificado, y trabajar. Luego, lo de tener más o menos equipos en el escaparate quizá dependa de circunstancias económicas, de los errores de gestión y de aquel drop que no entró, yo qué sé?

-Pues desde aquí - el donostiarra insiste-, me da la impresión de que el rugby en Bizkaia está triste y apagado, que, en vez de una ola para hacer txanpa, las finales europeas, con todo su éxito, han producido un reflujo y que los partidos internacionales ni allí ni aquí sirvan para nada a corto o a largo plazo.

-Callado estás más guapo.