El mostrador de la taberna donostiarra aparece bien provisto de pintxos y raciones, no caben siquiera los vasos de los catedráticos, que imparten su sabiduría sobre cualquier tema junto a la barra, después de efectuar una pequeña tournée de calentamiento por los establecimientos aledaños y que, tras esta última estación, les conducirá a una sociedad gastronómica para reponer, con plusvalías, las fuerzas desgastadas en la jornada laboral.

-El pasado fin de semana se celebró en Valladolid un concurso de pinchos y tapas -habla Murray gran amante de la vieja Pucela por alguna feliz circunstancia que se encontró en su primera visita a aquella ciudad-, así que éste podemos aprovechar el viaje con Hernani para visitar los bares premiados.

-Como se juega por la tarde contra El Salvador- dice el Barón de la Florida con buen ánimo-, luego podemos hacer una ronda nocturna para entrar en calor y celebrar el resultado, porque intuyo que obtendremos un resultado positivo, el equipo está creciendo y con las previsiones climatológicas se va a encontrar el Pepe Rojo como Landare Toki, así que?

-Así que en Valladolid va a llover bastante menos que en Hernani y va a ser un partido de sufrir en defensa y de guardar la disciplina, mientras que en Ordizia recibiremos el domingo a los del Quesos -interviene el Marqués de Altamira que cada semana está más optimista con la marcha del Ampo-, con el asfalto verde mojado. Esta temporada los escoceses no han perdido aún un partido siquiera y llevan cinco bonus ofensivos.

-Pues van a crujir las clavículas en Goierri tanto como en la Campiña del Pisuerga -apunta Galtzagorri que aprovechó su estancia en la Seminci para ver el derbi de Valladolid-, porque los dos equipos van los primeros de la liga con muy buenas razones y el Salvador solo ha perdido el partido contra el Quesos por un drop que encajaron a falta de un par de minutos.

Y el que está detrás de la barricada de ensaladillas y demás les sirve la última ronda exclamando.

-¡Que vienen! ¡Que vienen!