Jurado y tijeras

NO es que me importe a nivel personal ni profesional pero llevo muy mal que en Número Uno se haga publicidad de los conciertos de los miembros del jurado. No es de recibo que con la cantidad de cantantes que hacen galas, conciertos y bolos por todos los rincones, en uno de los programas de música que hay, solo hablen de ellos. En la última edición del concurso Mónica Naranjo que ya actuó en otro concurso similar, Tu cara me suena, vino a sustituir a Sergio Dalma, ya saben el mismo cantante que a pesar de copiar viejas canciones en italiano pidió a los concursantes que cantaran en castellano. Pues Mónica quiso aprovechar su oportunidad y tuvo dos momentos estelares. Uno en el que le pidió a un concursante que adelgazara y afirmaba que se lo decía por su bien. Así, como suena. Otro fue cuando despachó a la jovencita Amaia Moreno que clavó el Nana nanita nana en su duelo con un abuelo vestido de mariachi. Mónica se levantó y se puso de rodillas para decirle que la despachaba para "hacerle el favor de su vida". Parece que han descubierto el filón de los jurados. Un chollo que pone en valor a cantantes metidos a esta extraña ceremonia de jurados. Una epidemia que ha llegado a la tele y que no tiene pinta de desaparecer en mucho tiempo.

Lo que tiene toda la pinta de desaparecer de la programación en próximas ediciones es la retransmisión de los Premios Max de teatro y danza. Una de las pocas aproximaciones que tenemos a este ignorado mundo de la cultura. En lugar de corregir y trabajar en los ensayos se usó la tijera para recortar los agradecimientos de algunos de los premiados. ¡Menudo panorama! Para una vez que la tele sirve de soporte a la cultura va y aparece Paco con la censura. Qué penoso.