Diversas asociaciones judiciales aseguran que las cosas serían más fáciles si el Gobierno central hubiese aprobado una ley específica para la pandemia o hubiera dado por bueno un toque de queda. ¿Ni una pandemia será capaz de evitar escenas desagradables, antisociales y condenables? Las concentraciones nocturnas se han generalizado. Los ayuntamientos en Euskadi -en Nafarroa se rigen distinto- solo pueden recomendar. Lo saben bien los ertzainas que han recibido botellazos en las quedadas. Los hosteleros dicen que habría que gestionar el ocio nocturno, lograr la vacunación global e ir pensando de otra manera los encuentros juveniles.