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Hablando en bata

Víctor Prieto

Netanyahoo

NetanyahooEP

Mis excusas por el chiste fácil del título, pero estaba demasiado a huevo tratándose de un genocida que protagoniza todo tipo de búsquedas en Internet desde hace ya demasiado tiempo. Y sí, he aprovechado el nombre de un buscador en desuso porque así se las ponían a Fernando VII (o a Felipe II o a Retegi III... yo qué sé) y porque soy adicto a los juegos (de palabras) y porque yo lo valgo y vale ya... qué tanto joder. Punto y aparte.

También porque hoy la culpa de todo no la tiene Yoko Ono (que algo habrá hecho, seguro). No, esta vez la tiene él solito. De todo, todo, todo el horror y la barbarie en Gaza y aledaños. Y hasta me animaría a acusarlo de complicidad en el asesinato de Abel si no hubiera prescrito ya.

“¿Y Hamas no hizo nada malo en el origen de este devenir violento de un conflicto largo tiempo enquistado?”, pregunta un ingenuo fan de la música klezmer desde su silla instalada en la colina de Sión. Cojo aire y le respondo que sí, que claro y que ojalá (quiera Dios) hubieran reventado ellos antes que los asistentes al masacrado festival Tribe of Nova el 7 de octubre de 2023, donde mataron a más de 360 participantes en el festival israelí y tomaron como rehenes a cuarenta de ellos. Pero no ocurrió así. Y como yo no soy el Dios ni de unos ni de otros, los maldigo a todos y a sus descendientes y a los descendientes de los descendientes de sus descendientes. En plan Bíblico y por injusto que resulte. Es una rabieta personal sin más, ojo. 

A partir de ahora, sin embargo, voy a ponerme en modo lírico por culpa de Pete Seeger y de Víctor Jara, que me enseñaron que una canción es más que Oh, yeah, My baby y I love you, tremendo error que me ha llevado a una versión de If I had a hammer. Y el que quiera probarlo en un karaoke que busque en la red.

Y va la primera estrofa que me ha venido a lo que me queda por cerebro:

“Si yo fuera un mosquito volaría a Tel Aviv / picaría a Netanyahu dentro de la nariz / y después en el glande y luego en la pupila / inoculando virus por aquí y por allí...”

Y al estribillo de cabeza, claro...

“Picaría en los huevos, picaría entre uñas / sólo por provocar... dolor...”

Voy a por una segunda estrofa con la seguridad propia de un neurocirujano invidente y manco:

“Si yo fuera un paraguas estaría metido / en el triste ojete del puto Benjamín / abierto del todo para hacer más daño /cuando lo vayan a sacar...”

Ya sé que está por pulir. Pero vistos los resultados del último Festival de Eurovisión y las tonterías que hemos tenido que escuchar... Qué quieren que les diga: lo mismo la presento el año que viene. Hala.