El culebrón del verano
La suerte que han tenido algunos medios de comunicación este agosto, mes siempre corto de noticias, con el culebrón de Daniel Sancho en Tailandia es de traca. Los ríos de tinta escritos, los litros de saliva gastada y las toneladas de alpiste para pájaros que algunos periodistas están suministrando es antológica. Un supuesto asesino / descuartizador confeso, objeto de deseo de tertulias y telediarios. La frivolidad con la que se enumeran detalles escabrosos del asesinato como si se tratara de las aventuras de un erasmus al que le han cancelado el billete es, cuanto menos, sonrojante.
No es ciudad para jóvenes
Un fracaso del sistema. Otro más de la larga lista de problemas que nuestros políticos deberían atender. Pero no. Aquí se estilan las ocurrencias tipo “bono pintxos”, cine a 2€ para mayores o billetes de Interrail a mitad de precio. Lo entiendo. De verdad que lo entiendo. Las ocurrencias son sencillas. Brotan en un domingo de terraceo o tomando cubatas pagados por el contribuyente en el Congreso. Dar respuesta eficaz a problemas complejos, en cambio, exige un poquito más. Quizás demasiado para el perfil de nuestros políticos. Hasta que eso cambie, está claro que no es ciudad para jóvenes.
La derechona llorona
Rubén Manso, ex de Vox, disparaba con bala de cañón contra sus antiguos compañeros al afirmar en una entrevista que el partido se ha reducido a un grupo de irreductibles “de corte muy a la derecha, menos moderados y menos liberales”. Y es que, según Manso, “se ha pasado de la derechita cobarde a la derechona llorona”. Esta transformación, digna de estudio, se une a la larga retahíla de cambios de siglas, agrupaciones y reagrupaciones que han sufrido ciertos partidos situados más a la izquierda de nuestro espectro político. ¿Tendrán algo de esencia común pese a ser tan opuestos?
“No con mi dinero”
Vientos de guerra… tecnológica. Joe Biden, vía orden ejecutiva y llamada a la seguridad nacional, restringe las inversiones americanas en las principales áreas tecnológicas estratégicas de China. El miedo está ahí; que dólares americanos alimenten al gigante asiático en sectores tan importantes como la inteligencia artificial o la computación cuántica. Y es que todas estas inversiones, según temen los altos oficiales americanos, repercutirán en la modernización de las fuerzas armadas chinas, poniendo en jaque la hegemonía de EEUU. La política parece reducirse a un sonado “No con mi dinero”.
El chacachá del tren
Si de Kafka se deriva “kafkiano”, de Berlanga, recientemente admitido por la RAE, se deriva “berlanguiano”. Y berlanguiano fue el episodio ocurrido el pasado miércoles 9 de agosto en el cual el maquinista de un tren encontró al interventor manteniendo relaciones sexuales con una mujer sobre el cuadro de mandos. El incidente se saldó con un retraso de media hora por el cambio de locomotora exigido por el maquinista. “No toco esos mandos ni loco” debió decir. Desde luego, como excusa para llegar tarde a trabajar, no tiene precio. Seguro que la historia amenizó los 15 minutos del café aquel día.
