El dalái lama, que mañana cumple 90 años, vaticinó este sábado que espera vivir "otros 30 o 40 años más", una declaración sobre su longevidad que llega en medio de la crisis abierta con China por su sucesión y tras un cónclave de líderes budistas que ha cerrado filas en torno a él.

Las palabras del líder espiritual se produjeron durante la ceremonia de larga vida ("tenshug") celebrada en su honor en su residencia de Dharamshala, en su primera aparición pública desde el anuncio de su plan de sucesión.

"Deseo vivir otros 30 o 40 años más. Nuestras oraciones tienen su fruto", dijo en líder espiritual frente a una multitud emocionada.