Rusia quiere terminar la guerra a finales de 2025 o principios de 2026 con una victoria, ya que a partir del verano del próximo año empezará a tener “serios problemas” en la economía y será necesaria una movilización que puede socavar la situación sociopolítica en el país, según la inteligencia militar ucraniana, GRU.

“El cambio de 2025 al 2026 es clave para ellos. Quieren acabar con todo esto, porque según sus propios cálculos, si Rusia no sale de esta guerra como vencedora condicional, está muy lejos de la posibilidad de ser una superpotencia, a lo que aspiran”, dijo el jefe del GRU, según recogía la agencia Interfax-Ucrania.

El jefe del GRU, citando documentos rusos, señaló que, si Rusia no gana a finales de 2025, en el mundo sólo quedarán dos superpotencias: Estados Unidos y China, y no habrá lugar para la Federación Rusa.

“Son conscientes de ello. Para ellos es un período clave. Por eso, harán todo lo posible para ganar. De lo contrario, se alejan de absolutamente todos los procesos mundiales. Lo único con lo que pueden contar es con el liderazgo regional, y eso no les conviene”, sentenció.

Budánov señaló que Rusia prevé, según sus propios documentos, que “todos sus problemas comenzarán en el verano del año 2025”, ya que se juntarán tanto el factor financiero y económico como el factor sociopolítico. “Se prevé que en torno al verano de 2025, el impacto negativo en la economía comenzará a sentirse con fuerza en su país”, afirmó.

Reclutamiento insuficiente

Para el jefe del GRU, en Rusia el problema del reclutamiento insuficiente en el Ejército suena cada vez más agudo. “En este período (verano de 2025), se enfrentarán a un dilema: o anunciar la movilización, o reducir de algún modo la intensidad de las hostilidades, que en última instancia puede ser crítica para ellos”, dijo.

El responsable de la inteligencia militar de Ucrania cree que en Rusia existe una fatiga de la guerra, porque el conflicto ya ha afectado a una gran parte de la población rusa. En su opinión, el estado sociopsicológico de la población rusa también se vio afectado por los esfuerzos de Ucrania de trasladar las hostilidades al territorio de Rusia. “Esto ha cambiado la visión del mundo (de los rusos). Antes, toda la población rusa vivía en el paradigma de que, pase lo que pase, somos un país muy poderoso. Ahora, con las primeras explosiones en Moscú y en el territorio de la Federación Rusa, este mito ha sido destruido”, sostuvo.

41 heridos en Járkov

Por lo que respecta al parte diario de los combates, al menos 41 personas, incluidos cuatro niños, resultaron heridas ayer por el impacto en un edificio residencial de una bomba aérea guiada lanzada por Rusia contra la ciudad nororiental de Járkov, según el alcalde, Igor Terejov.

“Según datos actualizados, hay 41 víctimas, entre ellas cuatro niños, el menor tiene un año”, escribió el alcalde en su canal de Telegram, en el que indicó que el enemigo alcanzó el décimo piso del edificio, el fuego se extendió a cuatro pisos, del 9 al 12.

El jefe de la Administración Militar Regional, Oleg Siniegúbov, explicó en su propio canal de Telegram que una entrada del edificio quedó destruida y que el fuego arrasó los cuatro pisos superiores.

Asimismo, advirtió de la posibilidad cierta de que haya gente bajo los escombros. Según Siniegúbov, los rusos lanzaron seis bombas aéreas guiadas sobre la región.

En este contexto, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, señaló en Telegram que el mundo debe ayudar al país “a protegerse contra los aviones militares rusos, contra docenas de bombas aéreas guiadas que se cobran la vida de ucranianos todos los días”.

“Este terror se puede detener. Pero para detener el terrorismo, es necesario detener el miedo a decisiones firmes que son objetivamente necesarias. Sólo la determinación puede poner fin a esta guerra de manera justa. Es la determinación lo que protege más eficazmente contra el terrorismo”, recalcó.

Zelenski aludía así a la autorización que espera de EEUU y el Reino Unido para que Ucrania pueda utilizar sus misiles de largo alcance contra territorio ruso.

Frente de Kursk

  • Rusia rechaza ataques. El Ejército ruso dijo que rechazó en las últimas 24 horas seis intentos de las tropas ucranianas de cruzar la frontera con la región de Kursk, cuyo territorio ya está parcialmente controlado por fuerzas de Kiev. Según el Ministerio de Defensa ruso, unidades ucranianas intentaron penetrar en territorio ruso cerca de la pequeña localidad de Veseloye. El lugar del ataque se encuentra varias decenas de kilómetros al oeste de Sudzha, principal bastión tomado por los ucranianos en la región.