Irán afirmó ayer que ha recibido un mensaje de Estados Unidos que asegura que busca un alto el fuego en Gaza, un extremo que Teherán considera que no se corresponde con lo que está ocurriendo en Palestina. “Estados Unidos mandó un mensaje en los últimos tres días en el que asegura que buscan un alto el fuego, pero en la práctica apoyan el genocidio y los crímenes cometidos por los sionistas en Gaza”, dijo el ministro iraní de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian.
“Esperamos que Estados Unidos cambie su política lo antes posible y no apoye al lado ocupante”, añadió el jefe de la diplomacia iraní, de acuerdo con la agencia estatal IRNA.
Medios estadounidenses como el New York Times han afirmado que Washington ha advertido a Teherán y al grupo libanés Hizbulá que está preparado para intervenir si atacan a Israel. La República Islámica de Irán e Israel son enemigos acérrimos, compiten por la hegemonía regional y mantienen una guerra encubierta con ciberataques, asesinatos y sabotajes.
Irán capitanea el llamado Eje de la Resistencia, una alianza informal formada por organizaciones militantes como Hizbulá, el movimiento islamista Hamás y la Yihad Islámica, además de una miríada de grupos en Irak y Siria.
Teherán celebró el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre y desde entonces ha advertido en repetidas ocasiones de la posibilidad de que sus aliados abran otros frentes si no paran los bombardeos de Gaza.
Reclamación a la ONU y OIEA
Asimismo, el Gobierno de Irán reclamó ayer a Naciones Unidas y el Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) que adopten “acciones rápidas e inmediatas” para “desarmar” a Israel, tras las polémicas declaraciones de un ministro israelí sobre la posibilidad de lanzar “una bomba nuclear” contra la Franja de Gaza.
El ministro de Exteriores iraní, Hosein Amirabdolahian, subrayó la necesidad de “desarmar a este régimen salvaje y de apartheid” tras las palabras del ministro de Patrimonio israelí, el ultraderechista Amihai Eliyahu, al tiempo que advirtió de que sus declaraciones “son una muestra de que el régimen ha sido derrotado por la resistencia”.
Así, recordó que “mañana sería tarde” y reiteró que “la Casa Blanca es totalmente responsable de este genocidio”. Tras las declaraciones de Eliyahu, la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se desmarcó de estas palabras y anunció la suspensión “indefinida” del titular de la cartera en las próximas reuniones ministeriales, si bien por el momento sigue en el cargo, en medio de las condenas por parte de varios países de la región.
Israel ha sido uno de los principales opositores a la restauración del acuerdo nuclear firmado en 2015 por Irán, gravemente dañado por la decisión de Estados Unidos de retirarse del mismo de forma unilateral en 2018, y advirtió en numerosas ocasiones de que Teherán busca hacerse con armamento nuclear, algo desmentido por las autoridades iraníes.
Por su parte, el Gobierno iraní resaltó en varias ocasiones que Israel es el único país en Oriente Próximo con este tipo de armas y ha recordado que no es firmante del Tratado de No Proliferación Nuclear. Las autoridades israelíes mantienen una política de “ambigüedad nuclear” y no confirmaron oficialmente tener estas armas, si bien se considera que contaría con decenas o cientos de estas armas tras la revelación de su programa por parte de un antiguo técnico nuclear en los ochenta. A las condenas a las palabras de Eliyahu se sumaron también el Gobierno de Egipto, que ha sostenido que es una prueba del “nivel de desviación y extremismo” que existe en el seno del Ejecutivo israelí que dirige Benjamin Netanyahu.