Rosatom espera que el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) dé pasos concretos para evitar “ataques ucranianos” contra la central de Zaporiyia, señaló la agencia nuclear rusa al informar sobre la reunión sostenida ayer con el director general del OIEA, Rafael Grossi. En la reunión, celebrada en Kaliningrado, enclave ruso en el Báltico, las partes debatieron los cinco principios que se deben respetar para garantizar la seguridad de la planta de Zaporiyia planteados por Grossi el pasado 30 de mayo ante el Consejo de Seguridad de la ONU.

Esos principios son: no lanzar ataques contra la planta, que ésta no se use para almacenar armas pesadas o tropas con capacidad ofensiva, que no se ponga en riesgo el suministro eléctrico de la central, que se protejan todas sus estructuras, sistemas y componentes esenciales y que no se haga nada que mine estos compromisos.

El director general del OIEA “explicó su visión de las acciones futuras del organismo” en relación a estos principios, explicó Rosatom. “Por su parte (el director general de Rosatom), Alexéi Lijachov y otros participantes en la reunión, recalcaron que ahora esperan del OIEA pasos concretos para evitar ataques del Ejército ucraniano tanto contra la central nuclear como contra los terrenos aledaños y la infraestructura crítica de soporte”, señaló.

Esta reunión tuvo lugar apenas dos días después de que el presidente Zelenski denunciase que Rusia prepara una provocación en la planta de Zaporiyia, controlada por el Ejército ruso, que conduciría a una contaminación radiactiva. Durante la reunión en Kaliningrado, las partes también abordaron la visita de Grossi a la central del pasado 15 de junio, al frente de una misión de rotación de expertos. Durante este viaje el director general del OIEA pudo ver, según Rosatom, “las consecuencias de los ataques del Ejército ucraniano por medio de drones kamikaze” contra el sistema de distribución eléctrica de la central termoeléctrica de Zaporiyia. “Lijachov le explicó al director general del OIEA las medidas tomadas por la parte rusa para garantizar la explotación segura de la central de Zaporiyia, incluyendo su abastecimiento de agua tras la destrucción de la presa Kajovka por Ucrania”, añadió Rosatom.