Grecia venció el domingo en las urnas al miedo, a las amenazas que durante los últimos días previos al referéndum desde los medios de comunicación masivos en Grecia y en Europa empapaban a los griegos de temor a que el corralito permanezca, a que Grecia salga del euro, a que el país caiga en la catástrofe si las urnas decían no a someterse a las condiciones de austeridad impuestas desde los acreedores y socios europeos. El abrumador resultado del no, sin embargo, no despejaba la incertidumbre que ayer tenían los griegos sobre si continuaría el corralito, una duda que ayer por la tarde quedaba despejada después de que medios griegos anunciaran que el corralito se mantendrá al menos hasta el jueves próximo, según aseguraron citando a fuentes cercanas a una reunión que se celebraba por la tarde en el Ministerio de Finanzas, y de la que se esperaba saliera la publicación de un nuevo decreto sobre restricciones bancarias que sustituya al que ha estado en vigor durante los últimos ocho días. Según las citadas fuentes, continúa el cierre de bancos y la limitación de retirada de dinero en efectivo a través de los cajeros automáticos se mantiene en 60 euros diarios. La situación se examinará de nuevo mañana para decidir los próximos pasos a adoptar.
Además de las limitaciones a la retirada de efectivo, el control de capitales durante esta semana prohibía todas las transacciones de dinero al extranjero con excepción de los pagos para las importaciones de productos de primera necesidad. Asimismo no tienen límites las transacciones electrónicas en el interior del país, así como la retirada en cajeros con tarjetas del extranjero.
En una llamada telefónica, el ministro de Sanidad, Panayotis Kurublís, pidió al vicegobernador del Banco de Grecia, Theodoros Mitrakos, acelerar los trámites para agilizar el comercio de materias primas y productos farmacéuticos. Previamente la asociación de farmacéuticos de Grecia había solicitado al ministro hacer un plan de contingencia para asegurar las reservas de medicamentos.
Para facilitar que no haya escasez de liquidez entre los ciudadanos, el ministro adjunto de Transportes, Jristos Spirtsis, anunció ayer que se ha ampliado durante una semana más la gratuidad del transporte en la región de Ática, donde se encuentra Atenas. Los autobuses, trolebuses, el metro de Atenas, el tranvía y el tren eléctrico serán gratuitos hasta el 10 de julio, indicó Spritzis, ampliando la medida introducida la semana pasada para ayudar a los viajeros que se ven afectados por el control de capitales impuesto por el Gobierno.
El Gobierno de Alexis Tsipras decidió el pasado domingo 28 de junio imponer control de capitales y limitar la retirada de efectivo de los cajeros a 60 euros al día, tras la decisión del Banco Central Europeo de congelar el programa de liquidez para los bancos helenos.
Para paliar la falta de efectivo de los ciudadanos y reducir la demanda de petróleo, se optó por imponer la gratuidad del transporte en Atenas y sus alrededores. La medida expiraba ayer, un día después del referéndum cuyo resultado ha sorprendido a todo el mundo, tanto a favor del sí como a los partidarios del no que superaron sus expectativas.