parís. Un parado de 43 años al que supuestamente se le había negado el derecho a recibir prestaciones falleció ayer tras prenderse fuego frente a una oficina de empleo de Nantes, en el oeste de Francia.

"Es el gran día porque me voy a prender fuego en la oficina de empleo", escribió el día anterior en un correo electrónico remitido a un periódico local y en el que adelantaba su intención de acudir a la oficina de empleo con cinco litros de gasolina para inmolarse.

El diario Presse Océan recoge en su página web parte de estos mensajes, en los que el fallecido se quejaba de que las instituciones habían rechazado sus reclamaciones, pese a haber trabajado más horas de las establecidas por ley para tener acceso a cobertura económica.

Un policía citado por este periódico explicó que, a raíz de los avisos remitidos a la prensa, se había establecido una vigilancia especial en la zona, pero esta persona llegó "ya en llamas" por "una calle cercana".

Un responsable del instituto de empleo en Nantes, Jean-Charles Steyger, afirmó que el hombre que se inmoló ayer rechazó fijar un encuentro para tratar de encontrar fórmulas para dotarle de cobertura, informa la emisora France Info.

Este suicidio se suma al de un parado de 51 años que en agosto se quitó la vida en un barrio de las afueras de París.