La reciente decisión de Europa de rebajar las exigencias para reducir las emisiones de los vehículos ha dado un respiro a los fabricantes, y ha concedido dos años más para aplicar la norma Euro 7, retrasando su entrada en vigor de 2025 a 2027 para los coches y vehículos ligeros, y de 2027 a 2029 para los camiones. El clúster vasco de Automoción Acicae, que ha calificado de “correcta” la decisión de la UE, ha señalado que en este proceso de transición energética se debe aplicar el “sentido común” y, por ello, considera adecuado que se opte por dar “unos plazos más largos” para que toda la industria se adecue a las “altas” exigencias en materia de emisiones. 

No obstante, la apuesta por la descarbonizacion del sector es incontestable y los fabricantes se afanan en dejar de lado los motores de combustión. Es el caso de la compañía automovilística Volvo Cars, que acaba de anunciar que fabricará su último vehículo diésel a principios de 2024 y que desde entonces dejará de producir todos los modelos de este combustible de la firma, por lo que será uno de los primeros fabricantes tradicionales que deje de lado este tipo de motorizaciones.

Para Volvo, la decisión de eliminar los motores diésel es una muestra de la rapidez con la que está cambiando la industria y las exigencias de los clientes

Así lo ha anunciado la compañía en un comunicado, en el que ha detallado que esta decisión deriva de la medida adoptada hace poco más de un año de abandonar el desarrollo de los motores de combustión al vender su participación en Aurobay. “Ya no dedicaremos ni una sola corona de nuestro presupuesto de I+D al desarrollo de nuevos motores de combustión interna”, ha asegurado la compañía en el comunicado.

El director ejecutivo de Volvo Cars, Jim Rowan, ha afirmado que su futuro pasa por los sistemas de propulsión eléctricos, que además son “superiores” a los motores de combustión porque generan menos ruido, menos vibraciones, menos costes de mantenimiento para nuestros clientes y cero emisiones del tubo de escape.

“Estamos totalmente centrados en crear una amplia cartera de vehículos premium totalmente eléctricos que cumplan con todo lo que nuestros clientes esperan de un Volvo y será una parte clave de nuestra respuesta al cambio climático”, ha completado.

En los tres trimestres de 2023, Volvo matriculó 193.228 vehículos electrificados (híbridos enchufables y eléctricos) en todo el mundo , lo que representa una subida del 50% con respecto al año 2022.

Asimismo, la compañía ha destacado que esta apuesta por la electrificación es “lo correcto” y que viene motivada por el último informe sobre el balance climático mundial publicado por las Naciones Unidas que ha alertado sobre la urgencia climática y la necesidad de actuar.

Del mismo modo, Volvo considera que la decisión de eliminar por completo los motores diésel para principios de 2024 es el ejemplo de la rapidez con la que está cambiando tanto la industria del automóvil como las exigencias de los clientes ante la crisis climática.

Una apuesta imparable

El fabricante sueco de automóviles comercializó 509.158 vehículos en todo el mundo en los nueve primeros meses del año, lo que supone un aumento del 19%, mientras que en septiembre sus entregas se incrementaron un 25%, hasta 61.666 unidades, según datos publicados a principios de octubre por la empresa.

Por tipo de tecnología, la empresa matriculó 193.228 vehículos electrificados (híbridos enchufables y eléctricos) en todo el mundo en los tres trimestres de 2023, lo que representa una subida del 50%, al tiempo que la cifra mensual aumentó un 37%, hasta 21.103 unidades.

Por su parte, las entregas de vehículos híbridos enchufables crecieron un 17% entre enero y septiembre, hasta 112.599 unidades, y un 27% durante el noveno mes del año actual, hasta alcanzar un volumen de 11.898 unidades.

La compañía escandinava se ha aliado con el grupo Renault para desarrollar una nueva generación de furgonetas totalmente eléctricas

En cuanto a las ventas de automóviles 100% eléctricos, la firma escandinava cerró el acumulado hasta el noveno mes con un volumen comercial de 80.629 unidades, lo que supone más que duplicar (+149%) los datos de 2022. En septiembre, las entregas crecieron un 52%, hasta las 9.205 unidades.

Por regiones, Volvo Cars mejoró un 26% sus resultados comerciales en Europa en los primeros nueve meses del ejercicio actual, con 208.769 unidades vendidas, mientras que en Estados Unidos incrementó su volumen de entregas un 28%, con 92.125 unidades, y en China lo hizo en un 5%, hasta las 123.928 unidades. En tanto, en el resto de mercados sus cifras comerciales crecieron un 16%, hasta 84.336 unidades. En el noveno mes del año mejoró un 32% sus ventas en Europa (25.489 unidades), un 65% en Estados Unidos (10.946 unidades), un 4% en China (15.460 unidades) y un 15% en el resto de sus mercados (9.771 unidades).

Alianza con Renault

Grupo Volvo y Renault Group se han aliado para crear una empresa dedicada al desarrollo de una generación “completamente nueva” de furgonetas eléctricas que responda “a la creciente necesidad de una logística descarbonizada y eficiente”, han explicado en un comunicado.

Asimismo, han anunciado que CMA CGM se une a este proyecto y han añadido que seguirán buscando otros inversores y socios para lanzar la nueva gama Software-Defined Vehicle (SDV) totalmente eléctrica, cuya producción se espera que comience para 2026.

Las compañías esperan que la empresa conjunta comience a operar a principios de 2024, aunque la fecha está sujeta a la finalización de todos los procesos de aprobación regulatoria. Asimismo, la posterior entrada de CMA CGM también depende de la finalización del proceso de aprobación reglamentaria.