“Bienvenidos al circo de la Kings League”. Así presentó Gerard Piqué, uno de sus promotores, esta competición cuyo objetivo, a priori, es el de entretener al público. Además, supongo, que el del negocio. Esta nueva liga, que apunta a un éxito de audiencia (en la segunda jornada hasta casi un millón de espectadores la llegaron a seguir por Twitch, Tik Tok y YouTube), es un torneo de fútbol siete con reglas nuevas en el que participan exfutbolistas profesionales como Javier Saviola, streamers y es respaldado también por los afamados Iker Casillas y Kun Agüero o líderes de opinión como Ibai Llanos, que dirige otro de los equipos. Vamos, que lo tiene todo para que miles, sobre todo, de jóvenes usuarios de los mencionados canales tengan una cita más cada fin de semana para prestar atención a los partidos de este innovador evento. Pero… ¿esta Liga le puede hacer competencia a la Primera División y al fútbol convencional? “La Kings League es un circo, es como si comparas LaLiga con Pasapalabra”, se mofó Javier Tebas cuando se le cuestionó por el asunto. Pero con el reclamo de personajes como Piqué, envuelto siempre en la polémica y con un gran poder de atracción, seguro que Tebas y compañía no están tan tranquilos. La guerra está servida.