Las supersticiones sobre la lotería de Navidad son todo un clásico cuando se acerca el día del sorteo. Son muchos los que repiten cada año todo tipo de ritos para para resultar agraciados con el premio. Estos son algunos de los más conocidos y, también, raros.

Frotar el décimo. Hay diferentes clásicos, como frotar el décimo en la tripa de una embarazada, ya que siempre se ha considerado que un ser vivo creciente dentro de otra persona es una fuente de buena fortuna. Pero también frotar el décimo en una joroba o una calva se considera que da buena suerte. Este último caso puede tener su explicación en el famoso calvo de la lotería, que fue el protagonista del famoso anuncio durante ocho años.

Fechas señaladas. Uno de los grandes clásicos es comprar un número que coincida con alguna fecha relevante a nivel social, político o personal. Este año ha arrasado el 14320, día del inicio del estado de alarma en el Estado por la pandemia.

Lotería regalada. Aunque es una de las grandes tradiciones en torno al sorteo de Navidad, la sabiduría popular establece que un décimo regalado nunca toca.

Monedas. Hay quienes colocan una moneda de oro junto al décimo si lo llevan metido en la cartera o portan un alfiler en la chaqueta durante la celebración del sorteo. También hay quien, varios días antes, esconde monedas por los rincones de su vivienda, por la creencia de que el dinero atrae al dinero.

Pie derecho. Otro típico ritual de los supersticiosos es entrar y salir con el pie derecho de la administración, por aquello de que "entrar con el pie derecho" siempre da buena suerte.

El número 13. Aunque tradicionalmente el número 13 está considerado de mala suerte, en la lotería es todo lo contrario, y habitualmente es uno de los número más demandados y que antes se agotan.