legazpi - La peluquería Juan Kruz de Legazpi expone las fotografías que Photito sacó en la empresa Patricio Echeverría a comienzos del siglo XX. El estudio Photito de Donostia lo abrieron el mexicano Manuel Mondragón y Luis Vilella.

Las fotografías de la muestra forman parte del fondo de Gorka Salmerón. La exposición tiene su origen en el libro Luz para un tesoro olvidado: fotografías de Patricio Echeverría SA (PESA). 1918-1993. Notas sobre los fotógrafos de Aceros Bellota. Este trabajo de investigación recoge diversas imágenes realizadas por distintos fotógrafos a lo largo del siglo XX en Legazpi.

En esta ocasión, y siguiendo con la premisa de divulgar el patrimonio local, quieren presentar el trabajo de cada fotógrafo individualmente, hasta llegar a ofrecer una visión cronológica completa de este fondo fotográfico.

Comenzarán con algunas de las más antiguas: las de Photito. Han pasado ya más de 100 años desde que Photito estuvo en Legazpi, pero muchas de sus fotografías siguen teniendo un lugar en la memoria de los legazpiarras. Se han convertido en iconos. Cabe destacar que esta es la primera exposición individual que se le dedica a Photito en Euskadi.

En años posteriores se expondrán en la peluquería Juan Kruz imágenes de otros fotógrafos contratados por el empresario Patricio Echeverría para que fotografiasen su fábrica.

Aunque en Urola Garaia ya había fotógrafos en la época en la que Patricio comenzó a encargar retratos de su empresa, estos encargos recaían en fotógrafos foráneos. El empresario era un obseso de la calidad y hasta 1960 ningún fotógrafo de Legazpi trabajó para él. Por la fábrica pasó, por ejemplo, el gran Willy Koch.

A inicios de los años 90, Salmerón realizó el trabajo Leaxpi industri paisaiak. El fotógrafo legazpiarra retrató los pabellones de la empresa creada a comienzos del siglo XX. En su proyecto plasmó el final de una época, pues al poco la empresa que transformó Legazpi acabó desmembrándose.

El trabajo de Salmerón tuvo un gran éxito, pero le dejó un sabor agridulce: con el proyecto ya muy avanzado, supo que antes que él habían pasado muchos fotógrafos por la fábrica y encontró algunas de las fotografías que realizaron.

Casi 25 años después, en 2016, Salmerón cerró el círculo: publicó un libro con las fotografías de los profesionales que pasaron por Patricio Echeverría y recopiló diversos datos sobre la vida y obra de estos fotógrafos. Para ello tuvo que realizar una ingente labor de investigación.

El libro lo editó la asociación Burdinola, con el patrocinio del Ayuntamiento y la Diputación. Se presentó en diciembre de 2016. Al mismo tiempo, se montó una exposición con las fotografías de aquellos fotógrafos. Ahora cada fotógrafo tendrá su exposición, en la peluquería Juan Kruz. En enero y febrero se podrán ver las de Photito.