l Ayuntamiento de Amasa-Villabona gestionará este 2021 un presupuesto total de 6.859.326 euros, de los cuales podrá destinar a nuevas inversiones un montante de 646.588. La propuesta del gobierno municipal, que ha decidido pedir un préstamo para compensar la caída de ingresos y no realizar recortes, contó con la abstención del PNV y el voto contrario del PSE-EE.

Tal y como explicaba la alcaldesa, Beatriz Unzue, en el pleno celebrado esta semana, no se trata de un presupuesto al uso, sino un presupuesto “extraordinario”, y así lo explicaba: “lo entendemos como un instrumento para responder adecuadamente a la crisis económica y social que conlleva la crisis sanitaria del covid-19”. Así, las principales prioridades serán garantizar el bienestar de los ciudadanos de Amasa-Villabona, satisfacer las necesidades básicas de todas las personas para que se respeten los derechos humanos y reactivar la economía de la localidad.

Para que el Ayuntamiento pueda mantener el nivel de gasto de los últimos años y evitar la consecuente necesidad de realizar recortes de gasto, se ha considerado imprescindible solicitar un préstamo, que puede rondar los 575.000 euros.

El departamento de Servicios Sociales experimentará este año un incremento del 7,6% y se prevén poner en marcha nuevas líneas de ayudas. Por su parte, el área de Cultura aumentará sus recursos económicos un 7,4%, el de Servicios Generales un 10%, el de Medio Ambiente un 15,5% y el de Educación, un 24,3%. Se mantiene el nivel de gasto en Urbanismo, Euskera y Deporte, y los gastos de Alcaldía se reducen en un 10,5%.

Las principales inversiones que tiene previsto realizar el equipo de gobierno serán tres. Por una parte está la reforma del tejado del polideportivo Olaederra, que está presupuestado en 165.000 euros. Por otra parte está el proyecto de rehabilitación de Fleming Herri Eskola, para lo cual se han reservado 70.000 euros y, finalmente, el plan de la energía dotado con 50.000 euros. Asimismo, habrá inversiones para asfaltado, reparaciones en el cine Gurea, etcétera.

La sesión plenaria también aprobó, con los votos a favor de EH Bildu y la abstención del PNV y PSE-EE, una moción presentada por los hosteleros del municipio exigiendo al Gobierno Vasco y a la Diputación Foral de Gipuzkoa la adopción de medidas para la aprobación de un salario mínimo para los autónomos de la hostelería, con carácter retroactivo, desde el 14 de marzo.