- Hasta hace unos meses, la tramitación de expedientes de regulación de empleo era uno más de los tantos servicios que ofrece Aseplan. Esta empresa de asesoramiento dirigida principalmente a empresas y particulares vio cómo, de la noche a la mañana, el COVID-19 cambió totalmente su dinámica de trabajo. “En un año normal, en marzo y abril estaríamos en plena campaña del IRPF y con las prestaciones trimestrales de impuestos. Sin embargo, la pandemia nos ha obligado a estar tramitando ERTE para empresas o ayudas por cese de actividad para autónomos, entre otros.”, afirma Luis Nieto, gerente de esta empresa afincada en Beasain, que cuenta con más de 10 años de experiencia.

Con el parón de la actividad económica decretado por el estado de alarma, miles de empresas y autónomos tuvieron que cerrar sus negocios y acogerse a estos expedientes temporales para sobrevivir. A pesar de que en un principio la duración de los ERTEs estaban vinculados a la duración del estado de alarma, el Gobierno central decidió a principios de mayo ampliar las ayudas más allá del 30 de junio.

Sin embargo, muchos de los trabajadores afectados por estos expedientes todavía no han recibido la ayuda y en las últimas semanas se han registrado numerosas irregularidades en la tramitación de los mismos. Desde Aseplan admiten que no hay forma de contactar con el SEPE: “Entendemos que tienen que estar saturados, ya que se habla de más de 3.400.000 trabajadores incluidos en un ERTE, pero deberían haber facilitado la comunicación”.

Además de asesorar a empresas y autónomos, desde Aseplan también se encargan de gestionar la administración de las comunidades de vecinos, el alquiler de inmuebles o intermediar en compraventas de viviendas. Un sector que, como otros muchos, se encuentra parado a causa de la situación actual. “Ahora mismo el mercado está parado, ya que lo fundamental es hacer visitas y ahora no se pueden hacer. Las notarías también están trabajando como pueden y muchas operaciones urgentes se están atrasando hasta el fin del estado de alarma.”, aclara Luis Nieto. Ahora que los negocios vuelven a abrir sus puertas, la empresa beasaindarra retomará la tramitación de las declaraciones trimestrales de impuestos y de la campaña de IRPF, cuyo plazos se han retrasado a causa de la pandemia. Aseplan cuenta con dos oficinas ubicadas en Beasain, una encargada del asesoramiento de empresas y autónomos y la otra de administración de fincas.