La noria instalada en los jardines de Alderdi Eder, uno de los atractivos de Donostia durante las navidades, giró ayer por última vez. La atracción, de 36 metros de altura, 26 cabinas y 156 asientos, ha hecho las delicias de pequeños y mayores ya que permite disfrutar de una inmejorable vista de la bahía de La Concha. A cinco euros la entrada, las colas en los accesos a la noria han sido constantes durante las últimas semanas. En las próximas horas será el turno del desmontaje... hasta una nueva ocasión.