- El nuevo Plan de Reactivación Económica de Donostia (PREK), dotado de 2,2 millones de euros, se activará en junio, aunque Fomento de San Sebastián ha comenzado ya a establecer contactos con los distintos negocios para informarles de los nuevos requisitos y favorecer la inscripción de las empresas.
Así lo anunció ayer la concejala de Impulso Económico, Marisol Garmendia, que explicó que algunas cuestiones han variado respecto al PREK del pasado año, tras hablar con las asociaciones del sector, que han aconsejado establecer distintos requisitos, ya que algunos comercios o bares se han visto muy perjudicados por la pandemia, pero no todos.
De los 2,2 millones de euros disponibles ahora, un millón se destinará a la venta de 125.000 bonos de consumo, lo que generará un gasto inducido de 2,5 millones de euros, según cálculos de Fomento de San Sebastián. Otro millón se reservará para subvenciones directas y 250.000, para ayudas a la contratación. El importe máximo de ayudas que podrán recibir los establecimientos asciende a 15.125 euros.
Los bonos de compra para comercio y hostelería se agotaron el pasado año ya que la fórmula resulta muy interesante para los negocios, según dijo la concejala. Cada bono de compra es de 20 euros y el comprador paga doce, mientras que los ocho restantes los abona Fomento de San Sebastián. Cada persona tiene derecho a adquirir cinco y se entregarán un máximo de 250 por establecimiento. Se podrán obtener desde junio en la web www.dssmarketplaza.eus y se podrán usar hasta fin de año.
En el caso de las ayudas directas se han establecido distintos requisitos y se pueden obtener hasta 1.500 euros. En el caso de los bares, de acuerdo con la Asociación de Hostelería, se han establecido subvenciones de 1.000 euros para los negocios de menos de nueve trabajadores y 1.200 para los de entre nueve y 50. Además, es necesario demostrar unas pérdidas del 40% en 2020 respecto al anterior. Los locales que carezcan de terraza o solo de tres mesas, tendrán un 15% más de ayudas. En el caso de los comercios, la ayuda será de 900 euros para las tiendas de menos de seis empleados.
Además, estas cantidades aumentarán un 5% en el caso de que las titulares sean mujeres o los negocios se sitúen los barrios del Este de la ciudad, en Loiola y en Martutene.
La tercera línea de aportaciones, destinadas a la contratación en hostelería y comercio, busca favorecer el empleo de mujeres y parados mayores de 45 años. Los contratos de tres meses tendrán un máximo de 3.000 euros de subvención y los de seis meses, de 6.000 euros. Siempre para empleos de jornada completa.
Garmendia apeló a la "solidaridad de la ciudadanía donostiarra, que ha demostrado una sensibilidad especial hacia los más afectados consumiendo bonos de compra cuando los hemos puesto a su disposición". Recordó que en 2020 el Ayuntamiento destinó 6,2 millones de euros a estas ayudas. 3,2 millones fueron para las ayudas directas y los 180.000 bonos de apoyo al comercio y hostelería. 2.000 establecimientos se beneficiaron de las aportaciones, el 41% de ellos localizados en la zona Este.
"Apelo a la solidaridad de la ciudadanía, que ha demostrado sensibilidad con los bonos de compra"
Concejala de Impulso Económico
