- El Ayuntamiento de Donostia derribará el edificio Mateo Etxeberri, del paseo Ubarburu 27-29 de Martutene, una vez que hayan salido sus ocupantes, con el fin de destinarlo a espacios libres, viales, aceras y aparcamiento. Así lo anunció ayer el alcalde, Eneko Goia, tras la Junta de Gobierno en la que se aprobó dar una orden de desalojo a las personas que viven en el inmueble sin autorización.

El edificio, una antigua serrería al lado del río, es de propiedad municipal y el Ayuntamiento aprobó en junio dar audiencia a los residentes en él, aunque no se han pronunciado, según señaló Goia. Asimismo, anunció que si los ocupantes del inmueble no salen de él en el plazo estipulado de ocho días, el Ayuntamiento abrirá un expediente de recuperación hasta su desalojo.

Por otra parte, la Junta de Gobierno dio ayer luz verde a una segunda prórroga de las obras iniciadas en la Casa Consistorial con el fin de modificar los espacios interiores de cara a ubicar una oficina de turismo y reordenar las dependencias municipales.

En concreto, el Ejecutivo local aprobó una segunda modificación del contrato de obras de marzo del pasado año con la empresa Unebide Obras y Contratas, por lo que los trabajos subirán un 3,45% respecto a la primera modificación y pasarán a costar 6,2 millones de euros (IVA incluido) cuando en el primer encargo tenían un precio de 4,6 millones de euros. Esta primera cifra se encareció en diciembre pasado en un 28%. Con el cambio aprobado ayer, las obras se alargarán un mes más por lo que no estarán terminadas hasta finales de julio de 2021 y su incremento total será del 25%.

El cambio de una caldera destinada a la calefacción para la zona oeste del Consistorio es la causante del último incremento de plazo y precio de las obras. Los nuevos plazos previstos implican también el retraso en la remodelación de la zona este del antiguo casino, que no podrá comenzar hasta que esté terminada la de la zona oeste. Así, la nueva oficina de turismo no podrá ser una realidad hasta el año 2022, según calculan ahora los responsables municipales.

La Junta de Gobierno dio también su aprobación a la cesión de sendos espacios públicos para permitir la implantación de mejoras en la accesibilidad de dos edificios de viviendas. Uno de los casos consiste en la cesión de un espacio para la colocación de un ascensor en la calle Arrizar 3 del barrio de Altza. El segundo corresponde a otra superficie, en la que se instalará una rampa hacia el número 8 del paseo de los Olmos, en Bidebieta.