- La Escuela Municipal de Música y Danza, repartida entre la sede central de Atotxa y distintos barrios, aguanta la pandemia de coronavirus e inicia hoy el curso de modo presencial con 2.410 alumnos, una cifra muy similar a la registrada hace un año. Las clases no serán idénticas a las de los cursos pasados. La mayoría serán presenciales aunque algunas de ellas se desdoblarán para cumplir los aforos y el alumnado acudirá un día por semana al centro mientras que el otro seguirá las sesiones de modo virtual desde sus casas. Esto sucederá, por ejemplo, en determinadas clases de danza y lenguajes musicales. Para conseguir su objetivo, el centro de estudios ha comprado más de un centenar de videocámaras, algunas de ellas con micrófonos especiales, con una inversión de 8.000 euros, con las que poder hacer frente a las nuevas necesidades.

Así lo explicó ayer el director de la Escuela Municipal de Música y Danza, Mikel Mate, que recalcó que las clases arrancarán hoy "cumpliendo con todas las medidas sanitarias necesarias" así como los criterios de prevención del departamento de Educación del Gobierno Vasco, que se plasman en un plan específico de contingencia, como tienen que llevar a cabo todos los centros escolares.

Mate explicó que en los últimos dos años el alumnado había ido creciendo de modo paulatino, logrando los objetivos que se había fijado el centro escolar. "Este año no será así pero tampoco ha bajado el alumnado, lo que vemos positivo", señaló el director.

Como norma general todo el alumnado deberá usar mascarilla desde los seis años y antes de esa edad se aconseja también su utilización. Salvo en el caso de los estudiantes de instrumentos de viento, que no podrían tocar con protector buconasal, en todos los demás será obligatorio, incluidas las clases de canto.

Además, se mantendrán las distancias mínimas entre los asistentes de 1,5 metros como mínimo, aunque en algunos casos la reducción de los aforos de las salas permitirá que los espacios entre personas lleguen a los tres metros. Todos los estudiantes deberán aplicarse gel desinfectante al entrar en las instalaciones.

Las videocámaras permitirán que cualquier alumno que esté en casa enfermo o confinado pueda seguir también las clases online. Las audiciones, conciertos y otras actuaciones se ofrecerán sin público, así como otras actividades de la escuela como conferencias, talleres o cursos monográficos, que se emitirán en directo o se grabarán para darlas después en diferido.

Otro de los cambios que se aplicará desde hoy es el refuerzo de la limpieza por las tardes, una novedad ya que en el pasado curso solo se llevaba a cabo por las mañanas. Además, tras cada uso se tendrán que limpiar los aparatos utilizados y ventilar las aulas. El alumnado deberá hacer uso del kit de autolimpieza si la situación lo requiere.

También se han puesto en marcha unos circuitos de entradas y salidas separados y un puesto concreto para cada alumno en las aulas de modo que siempre sea el mismo. El plan de contingencia también prohíbe que acudan acompañantes salvo en el caso de personas con discapacidad y alumnos menores de dos años.

A pesar de que el nuevo curso arranca con 2.410 estudiantes, existen aún cerca de un centenar de plazas disponibles, que cumplirían igualmente con los estándares de seguridad decretados por el COVID-19, según destacó Mate. Por ejemplo, para los alumnos de 3 a 7 años, existen aún plazas, sin lista de espera, en Herrera, Altza, Añorga, El Antiguo, Intxaurrondo, Martutene, Salaberria, Urbieta y Riberas de Loiola.

En Herrera, además, hay posibilidades variadas para aprender un instrumento. Desde violín a viola, violonchelo, contrabajo, trompeta, trombón, tuba, bombardino, flauta, saxofón, triki, percusión, batería, bajo eléctrico, etc...

También hay un amplio abanico de opciones en la sede principal de Atotxa. Para más información, llamar al 943297830 o escribir a info@donostiaeskola.eus.

Aún quedan un centenar de plazas disponibles, cumpliendo los estándares anti COVID-19, tanto en Atotxa como en los barrios