- Una pasarela elevada con ascensores sobre las vías del tren unirá el hotel Terminus, pegado a la estación del Norte, y las viviendas de la plaza Blas de Otero, lo que permitirá a los ciudadanos pasar de un lado a otro cuando se inutilicen el actual paso elevado y el pasadizo de Egia durante las obras de construcción de la estación del TAV. Los trabajos han arrancado estos días de julio, como anunció este diario, con el vallado de zonas afectadas por la obra y topógrafos haciendo mediciones. Tendrán una duración de tres años y medio, por lo que la estación de alta velocidad no será una realidad hasta finales de 2023, si no hay retrasos.

La nueva pasarela comenzará a construirse en noviembre y estará terminada en la próxima primavera, cuando se demolerá la actual y se cerrará el subterráneo de Egia para la obra.

La transformación de la estación de Atotxa costará 80,4 millones de euros y seguirá el proyecto de la UTE Eptisa Cinsa-Jon Montero. Una vez terminada, Donostia será la primera de las capitales vascas en contar con una estación de alta velocidad.

Los trabajos se llevarán a cabo por fases de modo que se pueda mantener en todo momento la circulación de trenes en vía doble. Para lograrlo, se creará una doble vía provisional, que se desplazará sucesivamente de Oeste (lado Urumea) a Este (lado Egia) en función de las necesidades de la obra.

La mayor parte de los trabajos se ejecutarán en el recinto ferroviario aunque también en el exterior. Una de las primeras afecciones externas será el corte del camino de Mundaiz, entre los números 18 y 24, a finales de julio, para la preparar una plataforma de vía para los desvíos ferroviarios. Por este lugar se accederá a la obra, así como por un carril del paseo de Federico García Lorca. También se ocuparán 950 metros cuadrados en la plaza Teresa de Calcuta para el campamento de obra y acopios.

Tras desplazar las vías hacia la actual estación, se construirá una terminal provisional en el lado de Tabakalera, con acceso por Néstor Basterretxea, que funcionará en 2022. Parte ella se aprovechará más tarde como vestíbulo inferior de la futura terminal (7.400 metros cuadrados) situada bajo las nuevas vías. La cubierta generará una plaza de 5.700 metros cuadrados que conectará Tabakalera y Egia con el centro de Donostia.

Con la estación provisional hecha, se completará la construcción del vestíbulo de la nueva estación, los andenes definitivos, se ampliará el edificio de la terminal actual con dos plantas adicionales y se restaurará la marquesina.

A partir de principios de 2022 se utilizará una estación provisional a la que se accederá desde el lado de Tabakalera