ay que echar la mirada a 1916 para hablar de los inicios del atletismo en Bergara. El 11 de marzo de ese año tenía su puesta de largo la Federación Atlética Guipuzcoana y tres meses más tarde el número de clubes en el territorio alcanzaba ya la cifra de 17: trece de Donostia, tres eibarreses y uno de Bergara. Un año antes, además, en una carrera organizada en la capital guipuzcoana aparece como participante, entre otros, el Shooting Bergarés. Así comienza a tejerse la historia de este deporte en la villa mahonera, que Pili Arin ha hilvanado en las 117 páginas del libro que se presentó el viernes.

La publicación, que se empezó a barruntar al calor del 750º aniversario de la concesión de la Carta Puebla a Bergara, como recuerda su autora, es fruto de cinco meses de concienzudo e ilusionante trabajo, así como de "la colaboración desinteresada" de muchas personas que han aportado material e identificado personajes. Entre más de 300 fotografías, que se han depositado en el archivo municipal, se ha hecho una selección que da cuerpo gráfico a esta memoria viva del atletismo bergarés, en su versión en euskera y castellano,

Los comienzos dan paso al despegue del atletismo de pista. Corría la década de los 60 del siglo pasado. En este apartado se rememora que junto a Eduardo Murua y Juan Carlos Verde, se unió como entrenador Enrique San Nicolás, manresano que llegó a la localidad como técnico textil, avalado, en su faceta deportiva, por el título de campeón de España en triple salto y su participación a nivel internacional. "Fue el verdadero responsable de los años de gloria de este deporte en el pueblo", apunta el libro.

Así, el atletismo mahonero vivió su época dorada y brilló en los palmareses de los campeonatos de España en distintas modalidades. Agustín Loidi, José Acedo, José Luis Garmendia o Valentín Gantxegi son algunos de los nombres que subieron al pódium.

Fue también compañero de viaje de Arin, que dedica unas líneas a su particular experiencia. En los Pentekostes de 1964 tomó parte en la competición que se organizó en Agorrosin. Aquella prueba le abrió las puertas a su ingresó en el equipo local bajo las órdenes de San Nicolás. "Tenía 15 años. No fue fácil ser la única chica entre veintitantos chicos; mi grupo me acogió y me cuidó, pero había otros deportistas, que compartían con nosotros sus entrenamientos, que no entendían que la afición era más fuerte que lo que pudieran decir, hablar o murmurar de mí", relata. El camino abierto por Arin dio sus frutos y el atletismo femenino, a finales de los años 60, experimentó un auge.

El palmarés de los 60 y 70, la década de los 80, la sección de atletismo de Lokatza que arrancó hacia 1976, las causas del declive de este deporte en el municipio, las carreras populares, Antxintxika Triatloi taldea€ y el escenario actual, con un grupo de escolares que entrena en las pistas de Arrasate, dan contenido a este testimonio escrito sobre una modalidad deportiva a la que le han traído de cabeza las instalaciones.

"Bergara ha carecido de un club de atletismo, con su estructura deportiva, espacios específicos donde entrenar...; ello ha derivado en que los atletas que comenzaban a destacar en las diferentes escuelas de atletismo que han existido, hayan tenido que salir del pueblo y defender los colores de otros clubes de poblaciones vecinas. Las instalaciones deportivas básicas, Agorrosin, han sido propiedad del Club Deportivo Bergara, esencialmente dedicado a la promoción del fútbol. Al no existir un equipamiento municipal, aunque haya acuerdos con el club, ha supuesto una dificultad para el desarrollo adecuado de los entrenamientos", reza el capítulo bajo el epígrafe Conclusiones.

Este proyecto ha contado con el apoyo del Consistorio. Los interesados en adquirir el libro (15 euros) pueden encargarlo poniéndose en contacto con Pili Arin. En pdf está disponible en www.bergarakirola.eus.