- Aunque "agradecidos" de las ayudas que el Ayuntamiento arrasatearra va a ofrecer a la hostelería, "no son suficientes" para afrontar las necesidades de un sector fuertemente golpeado por la pandemia. Así lo manifestó ayer Arrasateko Ostalariak, el grupo constituido para "hacer frente al malestar" de los 75 locales y 300 familias que lo integran, en la valoración que hicieron de la reunión que un día antes mantuvieron con el Gobierno municipal. En el encuentro abordaron las subvenciones directas que el Consistorio va a otorgar a cada establecimiento en función del número de trabajadores y durante los meses en los que se prolongue el cierre: 1.000 euros mensuales para los locales hosteleros con hasta tres empleados; 1.200 en el caso de tener una plantilla de entre cuatro y seis personas; y 1.400 para los de más de siete trabajadores.

Estas ayudas, para las que se destinará una partida de "entre 300.000-350.000 euros, se concederán en una única solicitud (el primer pago correspondiente a noviembre se efectuará a finales de enero).

Además, de cara a 2021 los bares y restaurantes que se han visto obligados a echar la persiana seguirán exentos de pagar las tasas de la basura y el agua, y tampoco se les cobrará la relativa a las terrazas. Las inversiones realizadas en estas últimas se financiarán con hasta 2.000 euros por actividad. Sobre las ayudas al acondicionamiento de terrazas, que hasta el día 31 tienen el plazo de solicitudes abierto, la alcaldesa, María Ubarretxena, lanzó ayer un mensaje de "tranquilidad" a la hostelería, porque "en enero" se pondrá en marcha una segunda convocatoria a la que podrán concurrir aquellos negocios que ahora no puedan presentarse.

Unas horas antes de la rueda de prensa de los hosteleros, Ubarretxena y el concejal Victoriano Fuentes comparecieron ante los medios para informar de la nueva medida que el Gobierno municipal (PNV-PSE) trasladó el jueves al colectivo.

En cuanto a la reunión, celebrada un día después de que el LABI comunicara su decisión de dejar fuera de la apertura de la hostelería a las localidades con una incidencia de más de 500 positivos por 100.000 habitantes, entre ellas Arrasate, Ubarretxena destacó "la actitud constructiva y positiva" del sector "en estos momentos tan difíciles". Detalló, a su vez, que van a hacer un seguimiento a su situación y que "después de Navidad, en enero," volverán a juntarse para, entre otras cosas, "ver qué medidas podrá tomar el Ayuntamiento".

Arrasateko Ostalariak, creado para satisfacer los intereses de los hosteleros, recalcó que las ayudas directas que van a recibir son "insuficientes" para acabar con sus necesidades que "vienen generadas de años atrás por la falta de comunicación y los desacuerdos" entre el colectivo y el Consistorio. "Durante mucho tiempo nos hemos sentido marginados y abandonados por políticos y consejeros técnicos de todos los colores", afirmaron.

No obstante, valoraron "positivamente" esta primera toma de contacto con el Ayuntamiento porque, según insistió Maite Uribarren, "la vemos como un primer paso hacia el logro de un objetivo común, pero todavía queda mucho camino por delante".

Explicaron, asimismo, que se han acordado una serie de compromisos, entre los que citaron la elaboración de una ordenanza de terrazas "adecuada" con la participación activa de la hostelería, que estaría lista para "el tercer trimestre de 2021".

Por otro lado, y tras hacer un llamamiento "urgente" al Gobierno Vasco para que ejecute "el rescate de inmediato, ya que desde marzo muchos de nuestros compañeros no han podido abrir sus negocios", agradecieron a los arrasatearras por "ser parte de esta ayuda directa que hemos recibido y por las muestras de cariño que nos transmiten diariamente".

Por su parte, EH Bildu dio "la bienvenida" a las nuevas subvenciones, pero consideró que "se puede hacer más y mejor". "Son positivas, pero llegan tarde. Llevamos un mes apoyando en la calle al colectivo en sus reivindicaciones. Hasta que la situación no ha llegado al extremo el Gobierno municipal no se ha movido", criticó la portavoz Maider Morras. EH Bildu propuso destinar más dinero a ayudas directas, abrir una línea de subvenciones para el pago de alquileres y créditos, y estudiar cómo favorecer la liquidez de la hostelería.