na solución al exceso de tráfico en Nafarroa Etorbidea. Eso es lo que reivindican los arrasatearras que viven en esta calle, una de las arterias principales del municipio. El pasado 11 de junio trasladaron sus peticiones al Consistorio en forma de queja, después de que la avenida experimentara un notable aumento del tráfico, a raíz de las modificaciones provisionales que se introdujeron en la movilidad durante la desescalada por el coronavirus.

Entonces estos vecinos contabilizaron del orden de "9.000-10.000" motos y coches diarios en la citada vía, una cifra que con la vuelta a "la normalidad" ha disminuido a "6.500-7.500". Sin embargo, según explican, el paso de autobuses (400-500 al día) ha crecido "de forma considerable", debido a que se mantiene el cierre de Garibai Etorbidea. Esta situación, tal y como advierten, "conlleva un incremento de los niveles de peligrosidad, ruido y contaminación" en un punto con mucho tráfico peatonal, teniendo en cuenta que sirve de acceso al hospital y ambulatorio, además de la gran afluencia de usuarios que se dan cita en el parque infantil y el frontón de Zaldibar. A esto hay que sumarle que en un futuro "no muy lejano" los edificios de Kulturola y Juan Arzamendi Musika Etxea intensificarán el ajetreo de viandantes en la zona.

Para estos arrasatearras "minimizar" el tráfico motorizado en unas zonas "no debería acarrear el incremento en otras, que ya soportaban el trasiego de muchos vehículos".

Es, por ello, que proponen una serie de medidas para "aportar una solución al problema". Así, plantean que Nafarroa Etorbidea se convierta en una vía unidireccional, llevando la dirección suprimida por Zerrajera kalea. Piden, asimismo, que se cambie la parada principal de autobuses a otro espacio "más alejado" de las zonas céntricas "donde deben tener prioridad los peatones", al igual que los recorridos de las compañías de autobuses "para que no utilicen siempre las mismas vías".

Apuestan también por limitar la velocidad de circulación en la zona (radares o pasos de cebra elevados) y adecuar carriles bici "bien señalizados" en todas las vías urbanas. Por último, buscan "mantener los contactos" entre los vecinos y responsables municipales y, en este sentido, sugieren una nueva reunión de seguimiento de cara a septiembre.