- Tras catorce meses de obras y una inversión de más de diez millones de euros, la Diputación Foral de Gipuzkoa anunció ayer que da por finalizadas las obras del proyecto promovido por su departamento de Infraestructuras Viarias con el doble objetivo de mejorar la circulación y las condiciones de seguridad de la carretera GI-638, que enlaza las localidades de Deba y Mutriku por la costa.

A través de una nota, el ente foral comunicó que la actuación ejecutada, que también ha incluido la construcción de un paseo peatonal entre la playa mutrikuarra de Ondarbeltz (situada junto a la desembocadura de la ría de Deba) y el entramado urbano de Mutriku, "ha mejorado ostensiblemente la comunicación entre los dos pueblos costeros de Debabarrena; así como la conexión de Mutriku con el resto de localidades del territorio y con el hospital de Mendaro".

En lo referente a las características del proyecto acometido en la GI-638, desde la Diputación subrayan "el ensanchamiento y la mejora del trazado de la carretera", que registra una intensidad media diaria de 6.000 vehículos.

En este sentido, cabe destacar que "se ha ampliado el ancho de la calzada hasta los siete metros y se han suavizado las curvas y los puntos más problemáticos del recorrido".

Las actuaciones más significativas se han realizado en Ipitxarri, donde "se ha reducido la curvatura de la carretera y se ha construido una escollera de más de 40 metros", y en Alkolea, donde "mediante la ejecución de un túnel, se ha evitado por completo el paso por su punta".

Aunque con el proyecto ejecutado las prioridades han sido mejorar la conexión entre Deba y Mutriku y las condiciones de seguridad de la carretera, desde la entidad foral también quieren poner en valor el nuevo paseo peatonal que, señalan, "permite dar paseos saludables y disfrutar del paisaje litoral".