on apenas 17 años, justo después de haber finalizado el Bachillerato, la hondarribiarra María Rallo decidió en 2014 tirarse de cabeza a la piscina y trasladarse a Dresden (Alemania) para continuar sus estudios de viola. En aquel entonces, a duras penas chapurreaba un poco de alemán y su única experiencia previa en el país era el cursillo de verano que había realizado el año anterior con la profesora Pauline Sachse.

Precisamente continuar sus estudios con esta docente fue la motivación principal de Rallo a la hora de mudarse al país germano. "Nos entendimos muy bien", recordaba ayer la violista. Los resultados de su esfuerzo se hicieron patentes en 2019, cuando se graduó en la Musikhochschule de Lübeck con la máxima calificación,

Pero ya antes, en 2017, sus habilidades musicales habían quedado más que acreditadas cuando obtuvo una plaza en la Orquesta Filarmónica del Estado de Hamburgo, puesto que mantiene hoy en día, acumulando cuatro años de experiencia del más alto nivel con tan solo 24 años.

Aunque Rallo, con una admirable humildad, atribuye parte de su éxito a la "suerte", como aseguró ayer ante los medios, el alcalde de Hondarribia, Txomin Sagarzazu, exaltó el esfuerzo y la dedicación con el que la violista desarrolló sus estudios y ahora su trabajo.

No todos los días se tiene la oportunidad de disfrutar de artistas locales que han alcanzado cotas de éxito tan elevadas a nivel internacional, pero los hondarribiarras podrán hacerlo este sábado, 17 de julio. Y es que el quinteto de cuerda que Rallo conforma junto a David García, Andrea Fernández, Ane Aguirre y Mikel Ibañez ofrecerá un concierto a partir de las 19.00 horas en el auditorio de Itsas Etxea.

Los cinco músicos, bajo la denominación grupal de Rothaus, ofrecerán dos piezas para viola del compositor alemán Johannes Brahms, que nació, casualmente, en Hamburgo. Las entradas pueden adquirirse a través de los canales habituales por ocho euros.