pesar de las dificultades que el curso escolar 2020-2021 ha presentado a Servicios de Txingudi a la hora de desarrollar su habitual oferta educativa, las propuestas de la Mancomunidad han llegado este año a 14 de los 19 centros de Primaria y Secundaria de Irun y Hondarribia. La gerente de la entidad, Leire Zubitur, aseveró ayer que, aún en la difícil situación sanitaria que continúa vigente, "es necesario seguir trabajando para sensibilizar a la comunidad escolar".

A lo largo del curso, desde Servicios de Txingudi se han ofrecido un total de 145 talleres en los colegios bidasotarras para tratar temáticas como la gestión de los residuos, la limpieza urbana, el ciclo integral del agua, la energía o la materia orgánica. Además, el programa ZiSare, por el que se pretende que los estudiantes adquieran nociones sobre el autocompostaje, ha contado con la participación de unos 700 escolares, de 27 aulas de la comarca.

En cambio, las habituales visitas guiadas a diferentes estaciones de la Macomunidad, como la de tratamiento de agua potable de Elordi o la depuradora de Atalerreka, no pudieron tener lugar in situ, si bien se llevaron a cabo visitas virtuales mediante talleres online.

Además de hacer balance del curso actual, desde Servicios de Txingudi quisieron presentar ayer la principal novedad para el curso que viene: un escape hall con el objetivo de hacer reflexionar a jóvenes y adultos sobre el impacto que las acciones personales tienen en el medio ambiente. Eduardo Arzak, de la empresa de servicios ambientales Artelatz y dinamizador de la actividad, explicó ayer que el formato de escape hall permite que la actividad se desarrolle con menos personas con respecto a las escape room tradicionales. La meta: hacer que los jugadores salgan de la actividad "con las gafas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible puestas", como los alcaldes de Hondarribia e Irun, Txomin Sagarzazu y José Antonio Santano, que experimentaron ayer la actividad en primera persona.