- Tras el confinamiento por la pandemia del COVID-19, en junio del año pasado el Ayuntamiento de Irun tomó la decisión de ganar espacios para peatones y terrazas quitándoselo al tráfico, favoreciendo el mantenimiento de la distancia personal por parte de la ciudadanía. Una de las vías cuya peatonalización provisional más popularidad obtuvo entonces fue la calle Javier Esteban Indart, en San Miguel. Tanto fue así, que la asociación de vecinos del entorno solicitó formalmente al Consistorio que la actuación pasase a ser permanente, petición que el Ayuntamiento aceptó en agosto.

Desde entonces, la administración local ha ido dando pasos para consolidar la peatonalización de la vía. Ya en octubre, se pintó sobre el pavimento de la calle un entramado colorista que dio relevo a la antigua señalización horizontal de tráfico y a las líneas de aparcamiento.

El remate de peatonalización, en cambio, lo han presentado esta semana el delegado de Movilidad, Borja Olazabal, y la delegada de Vía Pública, Mónica Martínez, que ha relevado recientemente a Jon Ugarte en el cargo. Como explicaron, el final de la actuación ha consistido en la instalación de un nuevo mobiliario urbano "singular", en palabras de Martínez, en el que se incluyen trece jardineras prefabricadas de hormigón blanco, así como siete bancos y cinco sillas que crean diferentes puntos de encuentro a lo largo de la calle. El nuevo mobiliario, además de decorar la calle, impide el tránsito de vehículos al bloquear el centro de la calzada.

Olazabal quiso destacar durante su intervención que la peatonalización de Javier Esteban Indart fue un éxito "desde el primer momento", hecho que, unido a la sencillez de la actuación, motivó al Ayuntamiento a hacerla permanente. El delegado también puso a la calle como ejemplo de cómo con "algunas pequeñas acciones de urbanismo táctico" se puede conseguir ampliar espacios para los peatones en el centro de la ciudad "con poca inversión y sin grandes obras".

En ese sentido, Olazabal enmarcó la actuación en la misma línea de proyectos que han favorecido el tránsito de peatones y bicicletas en detrimento del de vehículos motorizados privados, como la de la avenida Letxunborro, y que son parte de la apuesta del Ayuntamiento por cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, que se concretará aún más en el nuevo PMUS de Irun.

La peatonalización se hizo permanente en agosto a petición de la asociación de vecinos de San Miguel, debido a su popularidad