Un mes después del día grande de las fiestas de Hondarribia, Jaizkibel Konpainia ha hecho pública su valoración sobre los hechos acontecidos durante la primera semana de septiembre.
En un comunicado difundido este jueves, la compañía recuerda que ya había expresado previamente su desacuerdo con el decreto emitido por el alcalde, al considerarlo “insuficiente” y considerar que "no suponía ningún avance". También señala que el 8 de septiembre entregaron una carta al alcalde, Igor Enparan, reiterando esta postura.
Al mismo tiempo, lamenta que ni el Ayuntamiento ni las instituciones hayan garantizado su cumplimiento. “El recurso judicial interpuesto por HAOSE (Hondarribiko Alardearen Ondarea Sustatzeko Elkartea) para intentar impedir que se cumpliera, así como la solicitud de manifestación contra el decreto realizada ese mismo día nos demuestran una vez más que quienes, en nombre de una supuesta tradición, son capaces de utilizar cualquier cosa en su beneficio, no desean imaginar ni construir espacios compartidos”, dicen.
La compañía crítica asimismo la actuación de la Ertzaintza, el Gobierno vasco y la Diputación Foral de Gipuzkoa, instituciones a las que han querido recordar que “los sentimientos no están por encima de los derechos”, y añade que "este 8 de septiembre han garantizado a los miembros de HAOSE la posibilidad de incumplir sus propias leyes, tanto al autorizar su manifestación, como al acoger su desfile”, añade.
Declaraciones del alcalde
Jaizkibel también carga contra las declaraciones del alcalde tras las fiestas, calificándolas de “increíbles”. Cuestiona cómo puede hablarse de un cumplimiento parcial del decreto “cuando apenas una docena de personas se presentaron en Gernikako Arbola”, e incide en que “no se puede afirmar que todas las partes hemos contribuido a reducir la tensión, cuando la única compañía que legitimó a toda la corporación municipal en el aurresku del día 7 fue Jaizkibel”. En este punto señala que “rechazar los espacios y los lugares de encuentro no es reducir la tensión; del mismo modo que esconder el polvo bajo la alfombra no equivale a limpiar la casa".
El comunicado también denuncia con firmeza las agresiones sufridas por integrantes de la compañía. En concreto, asegura que su capitana fue agredida en el portal de su domicilio y que un miembro de la formación y sus amigos fueron objeto de ataques verbales y físicas. Jaizkibel ha mostrado su solidaridad con todas las personas afectadas, “pertenezcan a la compañía que pertenezcan”.
Ganar nuevos espacios
En el plano positivo, destacan su participación por primera vez en el aurresku del 7 de septiembre, algo que consideran un acierto. “En los próximos años avanzaremos con la voluntad de participar en más espacios de este tipo, como por ejemplo, en el homenaje a los fallecidos que se celebra el 10 de septiembre”, adelantan.
La compañía también ha querido agradecer el apoyo recibido durante las fiestas y ha destacado especialmente el simbolismo del enorme pañuelo palestino cubierto de flores que colgaba del puente hacia la plaza de toros. En ese sentido, ha anunciado que la campaña solidaria llevada a cabo ha recaudado 12.000 euros, que se destinarán íntegramente a apoyar al pueblo palestino. “Con las coloridas kufiyas recibidas desde Cisjordania sobre nuestros hombros, sigamos mostrando nuestra solidaridad con Palestina”, expresa.
Mirando al futuro, Jaizkibel anuncia que ya ha comenzado a trabajar en una nueva estrategia, que parte del “diagnóstico del pueblo”. Sus integrantes apuestan por abrir espacios de diálogo y diseñar estrategias compartidas con quienes, como ellas, “desean unas fiestas igualitarias en Hondarribia”.
Para finalizar, la compañía lanza un último mensaje: “El tiempo de la convivencia está terminando, y se abre el tiempo de los derechos. Esa es la base de nuestro camino”.