Síguenos en redes sociales:

Ehun Kilo, el grupo que nunca dice adiós del todo

Formado a finales de la década de los 80 y con varios parones a lo largo de su trayectoria, vuelve a actuar en el Kilometroak de Elgoibar, al igual que hizo en la edición que tuvo como escenario a esta localidad en 1996

Ehun Kilo, el grupo que nunca dice adiós del todoNaroa Etxabe

Ehun Kilo forma parte del plantel de grupos que actuarán el domingo en el Kilometroak de Elgoibar. Volverán a hacerlo al igual que lo hicieron en el Kilometroak de 1996, pero con cambios en la formación en la nueva andadura del grupo.

Retorno a los escenarios

Ehun Kilo está de nuevo en la carretera. Esta veterana formación, una de las pioneras del heavy metal en euskera,ha puesto fin a su enésimo retiro con una actuación en el Koba Live de Abadiño el pasado 20 de septiembre.

Este fin de semana, además, afronta una doble cita que les llevó a actuar en Villabona, en el concierto de presentación del festival Hellbona, y el domingo les hará partícipes de la gran fiesta de las Ikastolas, el Kilometroak, que se celebra en Elgoibar. 

"Beldurripe aurrerago"

La cita de Elgoibar viene acompañada de otra particularidad, ya que han incluido “Beldurripe aurrerago” en el repertorio que han programado para el concierto que ofrecerán en Aita Agirre el domingo a partir de las 15.00 .

Esta pieza la compusieron expresamente para el Kilometroak de 1996 que tuvo lugar en Elgoibar y la volverán a interpretar de nuevo, casi 30 años después, haciendo un guiño al pasado. 

Inicio del grupo

Los orígenes del grupo se remontan a finales de la década de los años 80. Animados por su pasión por el heavy metal, Jon Zabala (voz), Jon Iturrino (guitarra), Jabi Bergara (guitarra), Kristian Etxabe (bajo) y Camilo Fernández (batería) decidieron unirse en un proyecto musical que vio la luz bajo el nombre de Ehun Kilo.

Vivieron una década marcada por los ensayos en un pequeño local del barrio de Urazandi y actuaciones en la que se ganaron una legión de fieles seguidores que, tres décadas después, siguen vibrando con su música cada vez que se suben al escenario. Aquel tiempo fue también testigo de la publicación de sus dos únicos discos hasta la fecha: “Euli artean” (1993) y “Esaiek…” (1995).

Un largó parón

Sin embargo, todo en esta vida llega a su fin o, al menos en lo que se refiere a Ehun Kilo, a un alto en el camino.

El grupo se despidió del público en el año 1997 con un concierto en el Gaztetxe de Elgoibar. Sin embargo, aquello no fue un adiós sino un largo, muy largo, hasta luego, ya que en 2017 volvieron a subirse al escenario.

“Hicimos un impasse de 20 años. Somos un grupo que se toma las cosas con mucha calma”, reconoció con humor Jon Zabala, vocalista del grupo.

Iturrino y Bergara, los guitarras de Ehun Kilo, en el concierto que el grupo ofreció en las fiestas de San Bartolomé de 2017.

Hatortxu Rock

Pese a que el tiempo había pasado, Ehun Kilo no cayó en el olvido y dos décadas después recibieron la invitación de formar parte del plantel de grupos del Hatortxu Rock.

Halagados por ese reconocimiento, decidieron coger de nuevo los instrumentos y volver a ensayar tratando de recuperar las sensaciones que tenían sobre el escenario 20 años atrás.

La experiencia resultó francamente positiva y ese año, además de actuar en el Hatortxu se reencontraron con el público en sendos conciertos que tuvieron como escenarios a Mutriku, Mendaro y Elgoibar.

Segundo alto

A partir de aquí llegó un nuevo parón en el que la pandemia de la Covid jugo un papel destacado, frustrando conciertos que tenían programado.

Comenzó una nueva travesía del desierto en la que los instrumentos y la voz de Jon Zabala permanecieron cuatro años en silencio hasta que recibieron una llamada de Ermua.

“Nos invitaron a actuar en el Vertigo Rock en 2023. Aquella llamada nos volvió a activar y retornamos a los ensayos.

Quedamos muy contentos por como nos salieron las cosas en Ermua y más cuando nos invitaron a actuar junto a Su ta Gar en la fiestas de San Juan en Eibar de ese mismo años”, recuerda Zabala.

Camilo Fernández marcó el ritmo de los concierto de Ehun Kilo con la batería durante muchos años.

El adiós de Jabi y Camilo

Sin embargo, la actuación en la villa armera supuso un antes y un después en la trayectoria del grupo. Camilo y Jabi decidieron que su camino en la música había finalizado y que ya no iban a seguir tocando. Ehun Kilo, tal y como vio la luz, acababa de dejar de existir.

Volvió el momento de guardar los instrumentos y pasar a convertirse en espectadores de la música que hacían otros.

La llamada del Koba Live

Pero Ehun Kilo nunca desaparece del todo. A finales de 2024, el festival Koba Live de Abadiño volvió a acordarse del grupo y le animó a participar en la edición de 2025.

Tocó reunirse y decidir en torno a la mesa para debatir durante una cena si aceptaban la propuesta.

Jabi Bergara y Camilo Fernández se reafirmaron en su decisión de no volver a actuar, lo que dejaba a los otros tres miembros del grupo en la disyuntiva de dar por muerto definitivamente a Ehun Kilo o buscar otra alternativa.

Nuevas incorporaciones

Como no podía ser de otra manera, optaron por seguir, y así fue como Patxi Zabaleta (guitarra) e Iñigo Barrenetxea (batería) llegaron al grupo.

“Patxi Zabaleta se sabe las canciones de Ehun Kilo mejor que nosotros mismos”, comentó entre risas Jon.

“Iñigo, por su parte, es una máquina a la batería, un tío muy aplicado que se esfuerza muchísimo. La verdad es que estamos muy contentos con los dos”.

Jon Zabala, durante el concierto en el festival Koba Livez que ha marcado el retorno de Ehun Kilo.

Disfrutar en los conciertos

El concierto del Koba Live marcó un camino por el que Ehun Kilo quiere seguir avanzando, aunque de una forma relajada.

El grupo quiere disfrutar de los conciertos ante el público y reencontrarse con unos seguidores que se mantienen fieles al grupo, pero sin meterse presión y evitando una sobrecarga de actuaciones.

De hecho, buscan dar continuidad a una forma de actuar en la que cada concierto pasa a convertirse en una fiesta de la que disfrutan tanto el público como los miembros de Ehun Kilo que están sobre el escenario, a pesar de los años que han pasado desde aquellos lejanos conciertos de juventud de finales del siglo pasado. 

El valor terapeútico del escenario

Prueba de que el tiempo corre es que Jon Zabala acaba de cumplir 60 años.

Pese a ello cree que todavía no es el momento de bajarse del escenario, y no le faltan argumentos para ello.

“Salir al cantar ante el público te ahorra el gasto en terapeutas para tratarte el ego. ¿Qué tiene el escenario para que sigamos queriendo salir? Es algo que haces porque te gusta. Cantas y ves que la gente está disfrutando con lo que haces. Hay un feedback que hace que tú también disfrutes con ellos. Ademas, les haces rejuvenecer 30 años, revivir el tiempo en el que escuchaban y cantaban esas canciones cuando éramos mucho más jóvenes. Por desgracia, el efecto dura poco y al día siguiente esos los 30 años están ahí”.

Cita en Aita Agirre  

Ajenos a las vicisitudes del calendario y la edad, el domingo, partir de las 15.00, muchos de aquellos jóvenes que hoy rondan los 50 y los 60 años y otros que han crecido escuchando la música de Ehun Kilo tienen una cita en Aita Agirre a las 15.00 para escuchar a un grupo que nunca termina de decir adiós del todo.