La plataforma Osasun Bidasoa ha denunciado públicamente la "crítica situación sanitaria que atraviesa la comarca", haciendo especial hincapié en la desaparición de la atención urológica y el deterioro de los servicios pediátricos, "que afectan a una población de casi 100.000 personas".
Según han alertado, desde el cierre del servicio de urología del Hospital Comarcal del Bidasoa, anunciado antes del verano, tampoco se está ofreciendo atención adecuada en el Hospital Donostia, donde inicialmente se había prometido trasladar temporalmente las consultas. Actualmente "no se está citando a nuevos pacientes ni en uno ni en otro centro, y muchas citas están siendo canceladas sin ofrecer una fecha alternativa".
Desde la plataforma afirman que esta situación deja sin seguimiento a pacientes diagnosticados de enfermedades graves como cáncer de próstata, riñón o vejiga, y sin diagnóstico a quienes presentan síntomas preocupantes. “Los retrasos pueden tener consecuencias irreversibles en la salud de los afectados”, advierten, para señalar también que la única alternativa para muchos pacientes es recurrir a la sanidad privada, generando una inequidad inaceptable.
La plataforma recuerda que hasta junio de 2022 el Hospital del Bidasoa contaba con cuatro especialistas en urología. Sin embargo, tras varias bajas y traslados, en julio de ese año quedó un único especialista, que acabó renunciando a su contrato "por la sobrecarga". Desde entonces, "la atención se ha mantenido de forma muy limitada, con listas de espera superiores al año y apenas actividad quirúrgica".
Pediatría y salud mental infantil
A esta situación se suma la "persistente falta de atención pediátrica en la comarca". La plataforma recuerda que desde el pasado 13 de abril no se atienden urgencias pediátricas en el Hospital Bidasoa. La Consejería de Salud prometió entonces una ampliación del horario de pediatría en los tres centros de salud hasta las 17.00 hora, algo que, según Osasun Bidasoa, no se ha cumplido: "solo se da atención hasta esa hora en Irun Centro, y no todos los días laborables", dicen.
Además, añaden que el Punto de Atención Continuada (PAC) de Irun Centro se refuerza únicamente con una enfermera en horario de tarde, de lunes a viernes. "Los fines de semana y festivos no hay pediatras ni personal de refuerzo, lo que deja a la población infantil sin cobertura médica especializada durante esos días".
Por otro lado, aseguran que la plantilla de pediatría, que antes del 1 de mayo de 2025 contaba con 12 plazas, se ha visto reducida a 11 tras la supresión de la consulta hospitalaria. De esas 11 plazas, según denuncia la plataforma, muchas están sin cubrir, "dejando a numerosos niños y niñas sin pediatra asignado. Además, se ha dejado de realizar actividad preventiva, limitando la labor de los pediatras a patologías agudas y urgencias".
Para terminar, denuncian que la consulta de psiquiatría infantil y juvenil del Bidasoa continúa cerrada. "Pese a que se anunció la creación de una segunda plaza, actualmente no hay ninguna cubierta. La atención a los menores con problemas de salud mental y a sus familias se sigue prestando con dificultades en Donostia, donde obtener citas, tanto para primeras visitas como para seguimientos, resulta muy complicado".