La sidrería Calonge, situada en el paseo Padre Orkolaga de Donostia, ha dado el pistoletazo de salida a la temporada del txotx por todo lo alto. Desde finales de enero el establecimiento está a rebosar cada fin de semana, y las reservas no hacen más que aumentar. Según Adrián Gorospe, bodeguero de Calonge, “los clientes llaman cada vez con más antelación, y ya en enero comenzaron las reservas de cara a marzo o abril”. Esta necesidad de los comensales de buscar hueco cuanto antes ya no supone una novedad. Gorospe indica que es un hecho que sucede y se acentúa “cada año”.
Tanto Adrián como la responsable de Calonge, Koro Calonge, están satisfechos con los resultados que está obteniendo su negocio en un inicio de año que está superando incluso las expectativas más optimistas: “La clientela está respondiendo mejor que el año pasado por estas mismas fechas. Entre semana solemos estar tranquilos, pero a partir del viernes por la noche comienza la locura. La verdad es que estamos muy contentos”, apunta.
Fundada en 1986 y comandada por la tercera generación familiar, Calonge cuenta con un tradicional menú de sidrería (desde enero hasta abril) que contiene txistorra, tortilla de bacalao, taco de bacalao, txuleta, queso, membrillo y nueces. La sidrería también dispone de una variada carta. Está abierta los lunes y martes en horario de cena, los jueves, viernes y sábados ofrece comidas y cenas y los domingos exclusivamente comidas.
En cuanto a su sidra, Gorospe destaca que las principales diferencias entre la cosecha de este año y la de 2024 residen en su color, “más oscuro”, y un cuerpo que presenta una densidad “considerablemente mayor”. Desde este momento hasta mediados de abril espera “muchísimo movimiento” y que la gente ponga en valor el descomunal trabajo que llevan a cabo las sidrerías no solo durante la temporada del txotx, sino también el resto del año.