El fútbol sala pierde a uno de los impulsores de este deporte en Gipuzkoa con el fallecimiento de José Ramón Iriarte
Sus primeros pasos como directivo al frente del equipo del barrio San Pedro de Elgoibar marcaron el inicio de un camino que le llevó hasta la Segunda División B y a un frustrado ascenso a la categoría de plata que no se fraguó por falta de presupuesto
El mundo del fútbol sala llora la pérdida de José Ramon Iriarte, tras su fallecimiento en Eibar la noche del 28 de enero a los 66 años a causa de una enfermedad. Iriarte era un hombre tenaz que llevó al fútbol sala de Debabarrena hasta al élite estatal en un largo viaje en el que hizo gala de una enorme capacidad de trabajo, una fe inquebrantable en el objetivo que perseguía y un apabullante don de gentes sustentado en sus innegables dotes de comercial.
Sus inicios están vinculados al San Pedro FS, un equipo del barrio elgoibartarra del mismo nombre al que poco a poco fue moldeando hasta convertirse primero en el San Pedro Elgoibar FS y, posteriormente, en el Debabarrena F.S. Ese proceso se vio aderezado de un crecimiento deportivo del equipo que le permitió escalar categorías desde la liga provincial a la categoría nacional, y alcanzar su mayor hito con el ascenso a la Segunda División B en la temporada 2012-2013.
Billete frustrado a Segunda División
Este logro pudo ser mayor aún ya que, no contentos con este logro, los jugadores y técnicos liderados por Iriarte en su papel de eterno presidente y pilar del fútbol-sala en Debabarrena se ganaron el derecho a subir a la categoría de plata defútbol sala estatal. Sin embargo, el fuerte presupuesto que conlleva la Segunda División frustraron esta posibilidad, obligando al equipo a renunciar al ascenso, quebrando un sueño iniciado años atrás en el barrio elgoibartarra de San Pedro.