En el número 42 de la calle San Juan de Urnieta abrió sus puertas el pasado mes de septiembre Elkarteen Etxea, un espacio abierto, moderno y funcional que no solo acoge diversos servicios de políticas sociales, sino que también se ha convertido en sede de diversas asociaciones, facilitando que se generen sinergias entre ellas. Jorge Segurado, alcalde de la localidad, relata en esta entrevista cómo es este nuevo lugar y cuáles son los beneficios que su funcionamiento está generando en el pueblo.
¿Qué es exactamente Elkarteen Etxea?
Es un edificio moderno y funcional que está al servicio de los y las urnietarras Se ha buscado un espacio intergeneracional, donde crear sinergías comunes a través de distintos agentes, sensibilizaciones y pensamientos. Mezclando todo eso, el objetivo es intentar generar relaciones e iniciativas que sean beneficiosas para el pueblo. Al final Urnieta es un municipio muy activo, en lo que a la participación ciudadana se refiere, porque hay bastantes asociaciones, por lo que se busca un espacio en el que puedan convivir todas ellas, y que a través de esa mezcla de experiencias puedan sacar un aprendizaje para el resto.
¿Cómo es Elkarteen Etxea?
Se encuentra en un edificio que estaba infrautilizado. En su día se ubicaba ahí el centro de salud, pero este pasó a otro punto en el municipio y había toda una planta vacía. Es un edificio amplio, de más de mil metros cuadrados, y lo que se ha hecho ha sido optimizarlo. Gracias a la colaboración del departamento de Políticas Sociales de la Diputación Foral de Gipuzkoa hemos podido renovar el edificio, primero por fuera y después por dentro. Actualmente en la planta baja se ubican un bar y unos aseos, y un par de salas para poder utilizar. En la planta primera hay distintas salas y es donde se desarrolla la actividad de las asociaciones y los distintos servicios sociales. La tercera planta se utiliza prácticamente para la actividad de la asociación de personas jubiladas y pensionistas del municipio, Denda Berri. Es un espacio muy amplio también, con salas y oficinas. Y el último piso es mucho más pequeño, de unos 100 metros cuadrados, donde hay una cocina y unos aseos.
Al principio ha destacado que Elkarteen Etxea constituye un espacio intergeneracional y diverso. ¿Qué otros agentes se han instalado en él?
Básicamente son servicios de políticas sociales y usos de asociaciones. Por ejemplo, el servicio de atención diurna a personas mayores se ofrece allí. También el grupo de apoyo a personas cuidadoras y el servicio Aukerak Suspertzen, una iniciativa del Gobierno Vasco para ayudar a niños y adolescentes que se encuentran en situación de desventaja social. Y las asociaciones que tenían su espacio en distintos puntos del municipio se han llevado a este edificio, como la asociación de juegos de rol Habitantes de Ismouth, la asociación de jóvenes Poxta Zahar, Manttale, que trabaja para fomentar el uso del euskera, el grupo feminista Bagara, etc. El Euskaltegi también se ha ubicado allí. Todo ello permite unir puntos de vista, sacar adelante iniciativas diferentes y que haya más movimiento en el pueblo.
Esa diversidad puede definirse como el reflejo de lo que es Urnieta.
Sí. Si algo tenemos en Urnieta son muchas iniciativas de la ciudadanía, tanto a través de asociaciones como particulares. Y mediante este nuevo espacio pretendemos fortalecer la comunión entre ellos. Que sirva como punto de encuentro y se convierta en uno de los lugares referentes del municipio.
¿Qué repercusión está teniendo en el pueblo desde su apertura?
Se están creando relaciones entre las asociaciones y además de que haya más iniciativas, el hecho de ver cómo funcionan y trabajan otros grupos enriquece a cada una de ellas. De esta forma se ve que el pueblo es plural y que todos tenemos cabida.
¿Qué otros proyectos se están desarrollando en esta materia en la localidad?
Por ejemplo, en colaboración con Políticas Sociales de Diputación estamos renovando lo que eran antes unos pisos tutelados, para convertirlos en pisos de acompañamiento de larga duración a personas que tienen cierto grado de dependencia. Estamos a punto de acabar la obra. Serán seis apartamentos pensados hasta el último detalle. Va un poco en la línea de lo que se quiere ofrecer de aquí en adelante en el ámbito de los cuidados. También está realizando un estudio exhaustivo sobre qué modelo de cuidados tenemos en el municipio y cuál queremos tener. Tenemos una ciudadanía que es cada vez más longeva y se tiene que dar un servicio cada vez mejor. Además de todo esto, a largo plazo estamos manteniendo relaciones con la Diputación para crear una residencia de mayores en el municipio. Acabamos de terminar la ocupación de los terrenos, para poder seguir trabajando con Diputación para que este proyecto sea una realidad lo antes posible.
