Jugó a pelota, fundó la empresa Kirolzale y organiza torneos de pelota, lleva la escuela de pelota de Zumarraga... ¿Qué es la pelota para usted?

–Un modo de vida. En 1993 empecé a jugar a pelota, en la escuela de pelota Beloki de Zumarraga. En 2009, un grupo de amigos cogimos las riendas de la escuela de pelota. Después, creé la empresa Kirolzale. Organizamos el torneo de El Antiguo, en Donostia, y el Memorial Goñi de Zumarraga, entre otros.

¿Qué más hace Kirolzale?

–Tengo un canal de Youtube y en el mismo doy consejos para organizar eventos. También imparto un curso online. Entre los alumnos, tengo a uno de Costa Rica.

¿Qué estudios hizo?

–Estudié Empresariales. Trabajé en una asesoría de empresas y en un bufete de abogados y me encargué de la administración en una empresa de Ordizia. Como lo que más me gusta es organizar eventos deportivos, finalmente fundé la empresa Kirolzale.

Ha tenido ocasión de conocer a mucha gente del mundo de la pelota.

–He conocido a mucha gente, sí: pelotaris que están en profesionales, pelotaris que juegan en aficionados, otros organizadores... También he conocido a muchos niños. Es muy bonito ver cómo se desarrollan como personas y como pelotaris. En el torneo popular de Zumarraga también he hecho muchos amigos: Jon Zufiaurre sigue jugando a los 59 años; otros veteranos que ya lo dejaron como Kalili, Alemán y Antzizar; los jóvenes... Todo lo relacionado con la pelota es muy bonito.

¿Hay algún pelotari que le haya marcado especialmente?

–Jokin Altuna. En 2014, ganó la final por parejas del Memorial Goñi. Altuna y Urruzola se impusieron a Artola y Erostarbe. Altuna tenía sólo 17 años y los de esa edad solemos ponerlos en el torneo de promesas, el que se juega dentro del cuatro y medio. Pero alguien me dijo que Altuna estaba preparado para jugar el torneo de categoría elite y lo consulté con Xabi Erostarbe. Él también me dijo que Altuna estaba preparado para jugar con los mayores. El primer partido lo jugó contra Ioldi e Irusta. Ioldi había ganado todos los torneos de aficionados y tenía ya 24 años. Pues el primer saque se lo sacó a la derecha e hizo tanto. “¿De dónde ha salido este tipo?”, pensé. A los seis meses debutó en profesionales.

De entre los que estos últimos años han jugado el Memorial Goñi, ¿quién cree que llegará a profesionales?

–El goizuetarra Beñat Apezetxea. Este año ha ganado el cuatro y medio del Memorial Goñi. Tiene 19 años y ya está entrenando con Aspe. Por otro lado, los dos brazos de Eñaut Lizeaga tienen un brillo especial.

Muchos de los profesionales de hoy en día participaron hace unos pocos años en el Memorial Goñi.

–Sí, pero cuando nosotros cogimos las riendas del torneo, estaba de capa caída. En los 90 tuvo un gran prestigio, pero poco a poco fue decayendo. Nosotros lo cogimos en 2010. Aquel año Joseba Ezkurdia ganó el torneo del cuatro y medio, el de categoría promesas. Los pelotaris de aficionados tienen muchos torneos y era difícil traerlos a Zumarraga. A veces lo conseguíamos, pero en el último momento nos decían que tenían otro compromiso. Hemos trabajado duro para que el Memorial Goñi volviese a ser un referente y hoy es el día en el que los pelotaris quieren venir a nuestro torneo. Y el resto de torneos se ponen en contacto con nosotros para compaginar los calendarios.

¿Qué hicieron para que el Memorial Goñi volviera a ser un referente?

–A los pelotaris les gusta participar en los torneos que tienen muchos espectadores, en los torneos que les motivan. Quieren que su nombre se dé a conocer y nosotros les ayudamos en ello. ¿Cómo? Hacemos un gran trabajo en las redes sociales, trabajamos con los medios de comunicación, conseguimos que el torneo tenga presencia en ETB y en infinidad de televisiones locales... Gracias a todo ello, el Memorial Goñi tiene cada vez más nombre.

Han conseguido que el día de las finales el frontón Beloki se acerque al lleno.

Hacemos un gran trabajo para atraer a los espectadores. Les hemos hecho ver que a este torneo vienen grandes pelotaris y hemos intentado ambientar el frontón Beloki. El que viene aquí no viene sólo a ver unos partidos de pelota, viene también a disfrutar de un evento. ¿A todos los que van a ver los partidos de la Real les gusta el fútbol o es que les gusta lo que se vive en el Reale Arena? La clave está en generar emociones. También hemos trabajado muy duro con los patrocinadores. No nos limitamos a pedirles dinero. También les invitamos a las finales. Queremos que todos los que vienen al frontón Beloki piensen: “¡Guau! ¡Qué bonito es estar aquí!”.

Hoy en día, los eventos que no son capaces de generar emociones lo tienen crudo.

–Los grandes emprendedores dicen que no compramos los productos por el propio producto, sino por las emociones que nos hace sentir. Y un evento deportivo es un producto. Es un servicio que ofrecemos a los participantes, los espectadores y los patrocinadores. Nuestro objetivo es que la gente disfrute de la pelota y para ello hay que darle a la gente lo que le gusta, sin perder la esencia de la pelota.

¿En qué puede mejorar el Memorial Goñi?

–Siempre hay algo en lo que mejorar. Este año no hemos hecho el paseíllo de presentación. Hacer el paseíllo por la pared izquierda no me parece bonito, pues los pelotaris están muy lejos de los aficionados. Por eso, este año los pelotaris han salido desde los vestuarios (en el frontón Beloki la salida de los vestuarios está en el centro de la grada) y hemos presentado a los pelotaris de uno en uno. Es un pequeño detalle, pero sirve para que los pelotaris se sientan importantes. Por otro lado, que la final del torneo popular se dispute justo antes de las finales del Memorial Goñi es también algo muy especial. Para esos pelotaris que juegan con pelotas goxuas, tener la oportunidad de jugar ante 600 personas es algo impresionante. He jugado a pelota durante toda mi vida y a mis partidos venían sólo los familiares y los amigos. Hacer que otros disfruten de lo que era mi sueño es muy bonito.

¿Qué me dice de la escuela de pelota de Zumarraga?

–Cuando la cogimos nosotros, no venían muchos niños. No es fácil. El frontón Beloki está en el centro del pueblo, pero a la gente le cuesta acercarse aquí. Tratamos de atraer a los aficionados a los torneos, para que luego trajesen a sus hijos a la escuela de pelota. Estos últimos años, ha sido lo que más me ha quitado el sueño. Afortunadamente, tenemos cada vez más niños. Actualmente tenemos unos 40 niños y sección de pala. En febrero hicimos un encuentro con la escuela de pelota de Leitza. Queremos hacer más eventos de ese tipo. ¿Por qué? Porque la pelota es un deporte muy solitario. Ir a Lizarra con tus padres, perder 18 a 2 y volver a casa... El fútbol, el baloncesto y el balonmano se practican en equipo y en la pelota también nos conviene hacer cosas en equipo. En junio los de Leitza vendrán a Zumarraga.